La presidenta Cristina Kirchner anunció este jueves por cadena nacional en Casa de Gobierno, un aumento del 50% de la cuota, de 600 a 900 pesos, para cada estudiante del Plan Progresar, que brinda respaldo a jóvenes de entre 18 y 24 años que no trabajan, para que puedan terminar sus estudios.
Cristina también anunció que aumentará el piso de ingreso familiar para que los jóvenes reciban el plan, de 4700 a 14 mil pesos. La Presidenta aseguró además que los hijos cuyas madres trabajen en casas de familia también podrán ingresar al Plan Progresar. Según Cristina se espera un total de 1.280.000 beneficiarios.
La Presidenta anunció también un aumento de 600 a 900 pesos de las 66.315 becas universitarias otorgadas por el Gobierno.
La primera mandataria informó también que los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo tendrán una ayuda anual escolar de 700 pesos.
El desafío
Tras finalizar con los anuncios, mirando a cámara en la Casar Rosada, Cristina Kirchner afirmó: “Asegúrense que ese al que voten les siga dando las cosas que ganaron en estos últimos 12 años. No se aceptan devoluciones”.
Además, la jefa de Estado diferenció frente a la militancia a las marchas en recuerdo del fiscal Alberto Nisman y la de apoyo al Gobierno del 1º de marzo al decir que esta última fue “bajo la lluvia y sin paraguas”.
“Quiero agradecerles el acompañamiento permanente de esta juventud increíble que se acerca Algunos decían que hacíamos patios militantes porque no teníamos convocatoria”, recordó la Presidenta
“Este 1º de marzo acompañaron no a una mujer, no a una Presidenta, sino a un proyecto político. Y debo ser tan sincera que debo reconocer que los dirigentes muchas veces nos equiivocamos. Yo sabía que iba a haber muchos compañeros, pero me sorprendió la cantidad de gente que fue sola, algunos por primera vez fueron a dar su adhesión a un proyecto.
“Fue bajo la lluvia y sin paraguas”, afirmó Cristina, comparando con la marcha en recuerdo al fiscal Nisman. “A mí me encantan los paraguas, me parecen muy elegantes”, afirmó, y luego contó una anécdota no muy precisa del autor de Cambalache, Enrique Santos Discépolo.