Los legisladores porteños que responden al kirchnerismo, José Cruz Campagnoli, Claudia Neira y Gabriela Cerruti, presentaron tres pedidos de informes al Ejecutivo de la Ciudad para conocer si funcionaba un taller textil clandestino en el inmueble situado en el barrio de Flores, donde este lunes murieron dos niños al quedar atrapados por un incendio.
Ambas solicitudes coinciden en indagar acerca de la existencia de “denuncias sobre el funcionamiento de un taller textil” en la vivienda de Páez al 2700, donde se registró un incendio que provocó la muerte de dos niños, de siete y diez años, y graves quemaduras a una mujer de 40 años.
“Informe si ha tomado conocimiento durante los últimos cinco años respecto de la existencia en dicho domicilio de un taller textil clandestino o de la posible comisión del delito de trata de personas, por parte de los vecinos, de organizaciones sociales o de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas”, precisa.
Asimismo, requiere información sobre “si se han realizado inspecciones por parte de la Dirección General de Protección del Trabajo durante los últimos cinco años. En caso afirmativo, indique cuáles fueron los resultados de las mismas y si se tomaron acciones al respecto. Remita actas labradas”.
“Atento a la gravedad de esta situación es que presentamos el presente pedido de informe”, señaló Campagnoli, y agregó que “de acuerdo a lo que dijeron los vecinos se trataba de un taller textil clandestino, cuyas ventanas estaban tapiadas desde hace tiempo”.
El legislador recordó que “no es la primera vez que el gobierno de Mauricio Macri es acusado de aplicar un mecanismo de protección a los talleres clandestinos para evitar que los mismos puedan ser clausurados”.
La existencia de talleres clandestinos en la Ciudad y en particular en el barrio de Flores, ha sido denunciada insistentemente. Sin embargo, la permanencia de estos talleres es el reflejo de la desidia y falta de voluntad política del Gobierno de la Ciudad para perseguir esta actividad”, aseguró Neira.
Y sostuvo que “en los últimos años hemos tenido que lamentar la muerte de varias personas, y en este caso en particular de dos niños, en incendios ocurridos en talleres clandestinos. No podemos seguir avalando la negligencia y la desidia del Estado ante esta situación que esclaviza y pone en riesgo a la población más vulnerable de esta Ciudad”.