La diputada y precandidata a gobernadora bonaerense del Frente Renovador, Mónica López, aseguró que al diputado Sergio Massa “todavía” le “queda un poco de oxígeno” para luchar por la presidencia y expresó que “no” van “permitir” el “desquicio que está haciendo el PRO” con el massismo.
López, que tras la fuga de dirigentes quedó como única candidata del Frente Renovador en la Provincia, cuestionó que “hay demasiada maldad alrededor de esas cosas que se tejen” sobre un posible alejamiento de Massa en el camino a la Casa Rosada y enfatizó: “Todavía nos queda un poco de oxígeno”.
La legisladora también cargó con dureza contra el diputado Francisco De Narváez, al asegurar que “le bajó el precio a Massa” cuando esta semana anunció que se bajaba de la candidatura en la Provincia para que el líder del Frente Renovador pudiera disputar una interna con la candidata del PRO en el distrito, María Eugenia Vidal.
“Él (por De Narváez) estuvo en este espacio desde enero hasta ahora y Massa lo bancó como precandidato a gobernador. Eso no se hace. Me parece una falta de respeto total”, agregó la diputada.
Consultada por radio El Mundo, sobre el futuro del Frente Renovador tras la fuga masiva de intentes, acotó: “Dicen que mientras esté tibio no está muerto y nosotros seguimos respirando”.
En línea con los fundamentos de otros dirigentes del massismo que buscan una alianza con el PRO, aseguró que “si (Mauricio) Macri no acepta la gran PASO le está dando la posibilidad al kirchnerismo de gobernar por 20 años más”. Y, remarcó que “lo que se quiere no es un acuerdo para que Massa sea gobernador, es llegar a octubre solo con una polarización” y sentenció que “de ninguna manera” ve al líder de su espacio como candidato a gobernador.
La diputada también reprochó que Macri se niegue a un acuerdo cuando en 2011 fueron a las elecciones parlamentarias juntos y remarcó que “este desquicio que está haciendo el PRO con nuestro espacio no lo vamos a permitir”.