"Hay que volver a la estética del filete, con los colores de la bandera azul y blanca". Pequeños gestos, palabras, pasiones, eso es lo que se vio el sábado al mediodía en un asado en Mataderos y es lo que buscará el canciller Rafael Bielsa para levantar el perfil en la campaña electoral que lo depositará en una banca del Congreso Nacional por el Frente para la Victoria. El candidato ya obtuvo el aval del presidente Néstor Kirchner para que los colores patrios y la técnica de pintura típicamente porteña le den color a la campaña.
"No vengo ni en carácter de canciller ni de candidato a diputado. Son momentos que le robo a mi familia, a mi mujer, a mis hijos, por eso los traje", confió Bielsa, como parte de un discurso más llano, el primero no leído desde que fue proclamado candidato. Por lo pronto, las citas filosóficas estuvieron casi ausentes en su boca, el sábado, al menos mientras estuvo en Mataderos. Vestido con pantalones deportivos (que le quedan mejor que a su hermano), el ministro supo hacerse entender: habló del perfil productivo que debe tener la Ciudad y prefirió escuchar, antes que hacer propuestas para el barrio.
Sin embargo, algunas fuentes de la Casa Rosada deslizaron que con Bielsa no alcanza para ganar la Ciudad de Buenos Aires. No lo ven bien en las encuestas, aunque sostienen que es el que más posibilidades de crecimiento tiene. Entienden que, enfrascados en la interna bonaerense, lo dejaron solo y ahora prometen bajar al distrito para hacerle sentir el rigor de las acusaciones al presidente de Boca, Mauricio Macri. En cambio, a la líder del ARI, Elisa Carrió, todavía no le encontraron la vuelta.
Bielsa ensayó críticas contra sus dos contrincantes. "Hay un candidato que cuando conduce una institución la utiliza para generar negocios personales; imaginemos entonces esta misma persona gestionando los recursos públicos", dijo sobre el empresario. "Después de la larga noche de los noventa, cuando empezamos a ver la luz, hay alguien que quiere poner mas túneles, y nos hablan de un parto doloroso, de tifones y tormentas ¿qué Argentina ve la señora Carrió?", preguntó ante un auditorio entusiasmado.
El acto fue organizado por el presidente de Nueva Chicago, Juan Ángel "Tito" Guerra, y el dirigente social Carlos Muñoz. También estuvieron los candidatos a diputado nacional Julio Piumato y Gabriel Fuks; el jefe de gabinete de Relaciones Institucionales de la Cancillería, Guillermo Llanes; la diputada porteña Ana María Suppa; los candidatos a legislador Juan Manuel Olmos y Sebastián Gramajo (de quienes el ministro dijo que no tienen historia pero sí trayectoria); el subsecretario de Culto, Héctor Masquelet; y el director de Deportes de la Ciudad, Daniel Bravo.
En tanto, el canciller se tomará licencia después del 24 de agosto, en forma escalonada, para darle momentos de tranquilidad al viceministro, Jorge Taiana, también candidato. No obstante, a mediados de septiembre Bielsa irá a Nueva York para hablar en la Organización de Naciones Unidas y una semana después acompañará a Kirchner en su discurso. El ajetreo de la campaña lo obligará, seguramente, a ir y volver durante esos quince días. Por lo pronto, el candidato viaja este lunes a Guayaquil, Ecuador.
OTROS ACTOS K
La senadora Cristina Fernández de Kirchner encabezará este lunes, a las 18:30, en el Teatro Cervantes, una nueva jornada sobre derechos humanos, junto al juez español Baltasar Garzón, quien se reunió con el Presidente. Por la mañana, ambos recorrieron junto a abuelas y madres de Plaza de Mayo el predio de la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA).
En tanto, el sábado el Partido Proyecto Popular tuvo un plenario porteño en el que se debatió cómo encarar la campaña electoral porteña, que tiene en Fuks a un candidato a diputado nacional por el espacio. Los más de cincuenta dirigentes se dividieron en cinco comisiones, entre las que se destacó la que debatió cómo empezar a prepararse para la fiscalización del comicio.
