Unas cincuenta personas organizadas en el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD) ingresaron a las 10:40, por Avenida de Mayo, al Cabildo de la Ciudad de Buenos Aires. Intentaron ingresar al edificio pero no se lo permitieron, por lo tanto, los manifestantes decidieron quedarse en el patio de dicho lugar.
Se vivieron momentos de tensión cuando no las fuerzas de seguridad no les permitieron a los manifestantes el ingreso al edificio, quienes forcejearon para entrar pero no hubo destrozos de ningún tipo ni detenciones. A minutos de la llegada de los manifestantes ingresó una docena de efectivos de infantería fuertemente pertrechados, a cargo del subcomisario de la seccional 2ª, Rubén Varela, pero a las 11:20 se retiraron, mientras las puertas de ingreso y egreso se mantenían cerradas por orden de la Policía Federal.
Según el vocero del MIJD, Pepe Ovidio, la decisión de movilizarse hasta el Cabildo se debe a que Raúl Castells aún se mantiene en prisión hospitalaria. "La detención es por motivos políticos y por ello nuestra lucha. Castells ya lleva 32 días de huelga, estuve con él hace una semana, bajó 12 kilos y se encuentra mentalmente lúcido, pero su salud física se mantiene agravada por una gripe y su corazón se encuentra con dificultades. El Gobierno planea tenerlo preso cinco años pero Castells antes prefiere perder la vida si es necesario".
Nina Peloso se encontraba en el lugar, en constantes negociaciones para que le permitieran colgar una bandera que exige la liberación de su marido. Pasado el mediodía, los piqueteros abandonaron el lugar.
El martes por la mañana, los manifestantes se concentrarán nuevamente en las puertas del juzgado donde se tramita la causa, ubicado en Viamonte y Libertad. Partirán a las 9 desde la estación Constitución.
El MIJD se viene movilizando, en Capital, diariamente desde la semana pasada. Estuvieron en las embajadas de Francia, Brasil y la Cancillería argentina. También se reunieron, siempre en pedido de la libertad de su líder, con el juez de la Corte Suprema de Justicia Nacional, Raúl Zaffaroni, y, tal como adelantó NOTICIAS URBANAS, con el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, quien permitió realizar el viernes pasado una misa en la Catedral metropolitana por la liberación y desprocesamiento de todos los presos políticos. Además, la semana pasada mantuvieron una reunión con el secretario de Derechos Humanos de Nación, Eduardo Luis Duhalde. Todos los entrevistados se interesaron por la libertad del dirigente social y se comprometieron en realizar diversas gestiones pero aún la situación del dirigente del MIJD se mantiene en iguales condiciones.
El MIJD, en Capital, mantiene diariamente siete merenderos distribuidos en distintos barrios, entre ellos Soldati, Ramón Castillo y Villa Crespo.