En una conferencia de prensa encabezada por la asociación Madres de Plaza de Mayo y los trabajadores de los diferentes Talleres Protegidos porteños, se acusó al Gobierno de la Ciudad de tener un plan estratégico "que incluye un decreto (929) que prevé la demolición de los talleres de la calle Suárez 2215 y la táctica del vaciamiento de insumos y personal".
Básicamente, pidieron que no se cierren los Talleres Protegidos de Rehabilitación de Salud Mental que funcionan en Barracas. En declaraciones a la prensa, Marcelo "Nono" Frondizi, secretario gremial de ATE y trabajador de los talleres, explicó la importancia de estas instituciones "en los cuales conviven en un clima de trabajo pacientes psiquiátricos y operarios, lo que ayuda a la resocialización de seres humanos con problemas en el alma a través del aprendizaje de un oficio".
El empleado, además, pidió que "se agreguen operarios y se amplíen a dos los turnos de producción" en los talleres de carpintería, herrería, laboratorio y costura. Según se informó, los talleres, que funcionan desde hace 41 años en ese predio,
emplean en la actualidad a unas 220 personas, entre operarios y pacientes.
La presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, se sumó a esta lucha e incluso los invitó a la emblemática plaza para que desde allí "salgan al mundo y todos escuchen el reclamo". Dijo también que "nadie debe permitir que se cierren los talleres", sumó su compromiso para "que eso no ocurra" e, incluso, advirtió que "si Macri tuviera la loca idea de cerrarlo todos los que estamos aquí ocuparíamos el edificio".