"Nos asombra que Curto no reconozca la ley 23.551 de asociaciones gremiales. Nosotros no ponemos a nadie de delegado. No sé cómo será en otros gremios, pero acá se elige por votación", afirmó el delegado adjunto de ATE en la Legislatura, Aldo de Santis. "Como marca el Ministerio de Trabajo, cumplimos con todos los requisitos. Primero se hacen asambleas de trabajadores y se postulan los que quieren. Si los demás lo aprueban, van a la lista de candidatos. Y después ésta se refrenda con el voto", terció José Viola, vocal del mismo gremio.
Muy disgustados, los delegados de ATE se entrevistaron con Noticias Urbanas para replicar los dichos de Curto, que los acusó de generar una "bolsa de trabajo" a través del nombramiento como delegados de personas que se desempeñan en la planta transitoria. El representante sindical sostuvo que esta situación se prestaba para la corrupción, ya que ser delegado implicaba poseer una garantía de continuidad laboral durante los dos años que dura el mandato y esto podía llegar a ser negociado a través del pago de una coima.
"Curto cuestiona que los empleados transitorios sean delegados. Pero la representación gremial de los trabajadores en esta situación no la pueden tener quienes integran la planta permanente, porque los intereses de ambos son totalmente diferentes", argumentó Viola. El vocal de ATE afirmó que cobra 640 pesos y que en dos años le bajaron el sueldo a la mitad, dos hechos que, según remarcó, no condicen con las acusaciones que su par de SUTECBA realizó.
"No tenemos capacidad de negociación de contratos y ese tipo de cosas", coincidió De Santis. "A mí también me bajaron el salario un 50 por ciento y, encima, estando de licencia por accidente de trabajo. Actualmente cobro 440 pesos", aseguró.
Pero los delegados no se limitaron a defenderse, aprovecharon la ocasión para apuntar a sus colegas de SUTECBA y sacar a relucir algunos temas vinculados, precisamente, con negociaciones. "Me extraña que Curto no critique nada de SUTECBA, cuando de hecho, los únicos que tienen a toda la cúpula inscripta en la categoría "A" son ellos", afirmó Viola, refiriéndose al máximo grado de escalafón de planta que ostentarían los delegados del mencionado gremio.
"Para obtener una "A" -continuó- hay que tener terciario. Lo dice la ley 5, que acá no se respetó porque se hizo un arreglo, justamente, entre los diputados y SUTECBA. Casi toda su junta está encasillada con una "A", y muchos de sus integrantes no tienen ni el secundario completo. Esto quiere decir que hubo negociación. En cambio ATE no tiene ningún delegado con esa categoría".
Los delegados de ATE aseguraron que la composición de su junta se basa en la diversidad. "Ocho miembros pertenecen a la planta permanente, diez a la transitoria y uno posee un contrato de locación", afirmó De Santis. También, muy molestos, afirmaron que es mentira que no luchan, sino que lo hacen por todos y "no solamente por un grupito".
En la Legislatura porteña hay tres tipo de empleados: los que integran la planta transitoria (se trata de personal contratado por el diputado de turno), los que pertenecen a la planta permanente (en este grupo están los que ingresaron por concurso cuando se inauguró la nueva Legislatura y los que venían trabajando como personal del Concejo Deliberante y fueron reconfirmados en sus puestos) y los que poseen contratos de locación. Estos últimos trabajan como autónomos y facturan por la venta de un servicio, que debe ser realizado en el tiempo que estipula el contrato. En la práctica, quienes se encuentran en esta situación actúan de manera similar a la planta transitoria, pero sin los beneficios sociales que estos sí poseen.
Los gremialistas aseguran que cada tipo de empleado tiene un diferente motivo por el cual reclamar. Los contratados por locación de servicios y los transitorios sufren la falta de estabilidad y garantías laborales (sobre todo los primeros). Y los permanentes quieren que se les reconozcan los adicionales por título y antigüedad. Según los representantes de ATE, cada vez que ellos les plantean estas inquietudes a las autoridades de la Legislatura, éstas responden con un "apriete constante".
"No quiero que esto quede como que es una disputa entre los trabajadores, porque acá todos los problemas los arman las autoridades de la casa, que no se ponen los pantalones largos para cumplir, de una vez por todas, con las leyes", afirmó Viola. "El vicepresidente, Jorge Enríquez, el director de Recursos Humanos, Reyes y el secretario administrativo, Gastón Aín, son los responsables", puntualizó De Santis. "Ellos permiten que echen a mujeres embarazadas, que le bajen el sueldo a gente con licencia por accidentes de trabajo y luego generan juicios que son perdibles y no les importa porque ellos no los pagan", denunció.
"Cuando vamos a ver al vicepresidente -agregó Viola- para reclamarle porque se producen bajas de sueldo en casos de accidentes de trabajo, dice: "no, no hay nada". Cuando le presentamos la copia que está firmada por la administración dice: "sigan con el recurso administrativo, vayan a juicio. Total, él se va en diciembre" finalizó.
