Las complicaciones, demoras e irregularidades durante los comicios del pasado domingo, generaron todo tipo de comentarios y denuncias por parte de representantes de las fuerzas opositoras al Gobierno Nacional.
"Nadie presta atención al Código Nacional Electoral. El código dice qué es lo que tiene que llevar cada urna a la Junta Electoral, y señala que es un derecho de cada partido, no una obligación, enviarle boletas para que la Junta las mande en la urna", describió el Ministro del Interior, Aníbal Fernández.
Apuntando directamente a la Coalición Cívica, el funcionario comentó que "con fecha 17 de septiembre, la coalición que preside la doctora (Elisa Carrió), firmada por Patricia Bullrich, mandó una nota al Ministerio del Interior planteando que no podía ser que los padrones de las mesas vinieran con 400 votantes".
En el texto enviado se señalaba la necesidad de "concentrar en el menor número de mesas la masa de votantes, pasando de 350 a 600, en las grandes, mediana y pequeñas ciudades", con el objetivo de "reducir la cantidad de fiscales partidarios en un 50 por ciento y logrando que en cada mesa haya fiscales de las fuerzas participantes". También se expresaba que "la transparencia puede generar demoras, pero que el acto eleccionario no debe confundirse con la visita a una góndola donde queremos finalizar rápido una operatoria".
Según comentó Aníbal Fernández por Radio 10, esta sugerencia "no fue recogida por ningún juez electoral y se sostuvo un promedio de 390 votantes en la provincia de Buenos Aires" y se redujo "de 450 a 390" los electores por mesa en Córdoba.
