Más allá de lo que decida este viernes (22 de marzo) la Corte Suprema de Justicia, el intento reeleccionista que encararon los gobernadores de Río Negro y San Juan, Alberto Wereltinek y Sergio Casas, respectivamente, sufrió un nuevo traspié el miércoles 21 de marzo ante el dictamen de la Procuración General de la Nación, que recomendó al máximo tribunal que acepte los amparos interpuestos por sus opositores contra sus intentos de permanecer en el poder por un tercer período.
De todos modos, hasta estos días los expertos aseguran que la Corte dictaminará en igual sentido que la Procuración, que publicó su resolución con la firma de la procuradora general de la Nación para asuntos de derecho público no penal, Laura Monti.
Los casos de ambos mandatarios guardan una gran similitud, con algunas diferencias. Weretilnek fue electo en 2011 como vicegobernador de Carlos Soria, que en la noche de Año Nuevo de 2012 fue asesinado por su esposa, por lo que debió asumir la gobernación en su lugar. Luego se presentó a la reelección y lo logró, en 2015.
Sergio Casas, por su parte, fue electo en 2011 como vicegobernador de Luis Beder Herrera, a quien sucedió luego como primer mandatario. En las próximas elecciones -serán el 12 de mayo- buscará su tercer mandato consecutivo, ya que convocó a un referéndum el 27 de enero último, que le habilitó esa vía.
La Rioja
En este punto, existe un antecedente. El 21 de enero último, la propia Lucía Monti había dictaminado -convocada por la Corte Suprema- que para el caso del referéndum convocado por Casas “entiendo que las cuestiones esgrimidas deben tramitar ante la justicia de la Provincia de La Rioja, puesto que el respeto del sistema federal y de las autonomías provinciales exige que sean los magistrados locales los que intervengan en las causas en que se ventilen asuntos de esa naturaleza”.
Por esta razón, la procuradora expresó que “es mi parecer que en el presente se intenta que la Corte intervenga en un proceso que debe estar sujeto a la jurisdicción y competencia de los magistrados de la provincia”, refiriéndose al amparo propuesto por los diputados Héctor Olivares (presidente de la UCR riojana) y Marcelo Wechsler (interventor del PRO en esa provincia), que patrocinó el exdiputado radical Ricardo Gil Lavedra.
Con este dictamen se abre la posibilidad de que la Corte acepte, en definitiva, que ambos mandatarios, que responden a ambos lados de la grieta -Alberto Wereltinek, cercano a Macri y Sergio Casas, peronista- cuya suerte está atada a la del otro, sea cual sea, finalmente se vean favorecidos por su dictamente final. Éste sería, simplemente, el de no tomar sus casos y, por lo tanto, oficializar las sentencias de las cortes de ambas provincias.
Para abrir el espectro hacia la duda, Monti especificó en su dictamen sobre La Rioja que el Artículo 177 de esa Carta Magna prevé que la enmienda reeleccionista “solo quedará incorporada al texto constitucional si fuere ratificada por consulta popular, que tendrá lugar en oportunidad de la primera elección general que se realice”. Como el referéndum se realizó el 27 de enero último, esta circunstancia inhabilitaría su vigencia, según la procuradora, que cuestionó no sólo la fecha elegida por Casas, lejana a las elecciones, sino su oportunidad, con parte del electorado en vacaciones.
Río Negro
Monti opinó en este caso, que de acuerdo al Artículo 175 de la Constitución provincial, que establece que “el gobernador y el vicegobernador pueden ser reelectos o sucederse recíprocamente por un nuevo período y por una sola vez”, mientras que “si han sido reelectos o se han sucedido recíprocamente, no pueden ser elegidos para ninguno de ambos cargos, sino con un período de intervalo”.
La funcionaria de la Procuración estimó que la interpretación de que, como Wereltinek no cumplió un período completo en su primer mandato podría ser reelecto por tercera vez, “vulnera el principio republicano de gobierno”.
Mañana, la Corte resolverá sobre el problema de fondo, que es el sí o el no a la repetición de los mandatos que plantearon algunos gobernadores para continuar en el poder por tercera ocasión consecutiva. Es difícil anticipar su dictamen, pero una sola cosa es segura: alcanzará a ambos gobernadores por igual, ya que si autoriza a uno, deberá abrirle el paso al otro.
Si esto no ocurre, la grieta se habrá manifestado una vez más.