Mediante un comunicado, el bloque del Frente para la Victoria-Partido Justicialista (FPV-PJ) anunció que solicitó el apartamiento de la Cámara de Diputados de las legisladoras de Cambiemos Elisa Lilita Carrió y Paula Oliveto Lago por “inhabilidad moral”, a causa de los vínculos que sostuvieron en el pasado reciente con el presunto espía detenido, Marcelo D’Alessio.
Éste último fue detenido por el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, acusado de integrar una asociación ilícita que se dedicaba al procaz delito de la extorsión y dentro de un tiempo podrían adornar otras imputaciones más la carátula de su expediente.
Los legisladores del FPV-PJ evaluaron que “surge en el expediente que ambas diputadas habrían estado, al menos, en conocimiento de las actividades de inteligencia ilegal realizadas por una organización paraestatal, pudiendo haber hecho uso de dicha ‘información’ o participado de dicha actividad”, para sostener su petición.
En este sentido, la jefa moral de la Coalición Cívica y su colaboradora deberían, para los legisladores de la oposición, ser excluidas de la cámara baja por “inhabilidad moral sobreviniente en el ejercicio de sus funciones”, de acuerdo a lo que tipifica el Artículo Nº 66 de la Constitución Nacional.
Los diputados del FPV-PJ alegaron que si ambas legisladoras conocían la existencia de una organización para recolectar inteligencia, que funcionaba en relación con el Estado, tal como permiten suponer las pruebas que consiguió el juez Ramos Padilla en su investigación, estaban obligadas a denunciar a D’Alessio y a sus cómplices ante la Justicia. “Es deber de todo funcionario público denunciar los delitos que conozcan en el ejercicio de sus funciones -art. 177, inc. a- del Código Procesal Penal de la Nación”, denunciaron los diputados peronistas.
En su conferencia dictada ante la Comisión de Libertad de Expresión, el juez expresó que “la primera publicación que se conoce y que está en la resolución es un tuit de la diputada Carrió que señalaba que esta investigación era una operación”, para mostrar a continuación un chat de uasap extraído del teléfono de Marcelo D’Alessio, en el que éste reconoce que “yo hice cosas con ella y con Paula Oliveto”.
Esta diputada es la más comprometida, como si Carrió le hubiera pasado a ella el contacto de D’Alessio para que lo “atendiera”. En un audio que le dejó D’Alessio en su teléfono, éste la trata con una familiaridad impropia, llamándola “Pau” y “Negra”, como si sostuviera con ella un trato cotidiano. Para peor, en esos audios le ofrece entregarle grabaciones y videos que D’Alessio sólo podía obtener de manera ilegal.
Ninguna de las legisladoras está imputada por ningún delito hasta ahora, pero existe la posibilidad de que sean citadas al juzgado a declarar, al menos como testigos.
En la solicitud del bloque peronista están previstas, por si no avanzara el proyecto de exclusión, otras medidas alternativas, que contemplan la corrección disciplinaria, la remoción o que se les solicite la renuncia.