¿Qué pasa con la construcción de las nuevas líneas de subte?

¿Qué pasa con la construcción de las nuevas líneas de subte?

Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) controla la construcción de dos tramos que abarcan un total de 5,14 kilómetros. Corresponden a las líneas B y H. También se está edificando una cochera en la estación Congreso de Tucumán, actual terminal de la línea D. Sin embargo, los 70 kilómetros proyectados en la ley de ampliación de la red de subterráneos, que votó la Legislatura a fines del año pasado, aún distan de empezar a ser una realidad


La ampliación de la red de subterráneos siempre fue, quizás, la estrategia a largo plazo más ambiciosa de la administración de Aníbal Ibarra. Por el momento, las nuevas líneas F, G, I y J, más las ampliación norte de la línea H y la extensión hasta Puerto Madero de la línea B, parecen estar lejos de iniciarse. El gobierno porteño, en cambio, sí está realizando dos obras: un tramo de la línea H (hacia Parque Patricios) y otro de la línea B, que por el momento comprende dos estaciones. También se está edificando una cochera en la estación Congreso de Tucumán (Línea D). Las construcciones en marcha están bajo la órbita de la empresa Subterráneos de Buenos Aires S.E (SBASE).

Las obras en la línea H fueron inauguradas en abril de 2001. Se trata de un total de 11 kilómetros, que vincularán Nueva Pompeya con Retiro. El tramo actualmente en construcción es el denominado "B", que va desde Inclán hasta Plaza Once y abarca 3,34 kilómetros. Las estaciones en ejecución son las denominadas Inclán, Humberto 1º, Venezuela y Plaza Once. La metodología aplicada para su construcción es la denominada Cut & Cover, que permite trabajar en ellas sin que el tráfico de la avenida Jujuy se vea afectado en su totalidad.

En el futuro, según el proyecto, se debería realizar un segmento inicial que una Nueva Pompeya con la estación Inclán y otra sección que conecte Once con Retiro. "La línea H fue proyectada por SBASE y luego se dividió en tramo sur y norte. El tramo norte se incluyó en el paquete de nuevas líneas que se votó en la Legislatura en noviembre pasado y que no quedaron bajo nuestra órbita", explicaron fuentes de la empresa.

Desde allí también aseguraron, refiriéndose a la línea B, que "en la avenida Triunvirato está avanzada la obra civil y se están empezando a colocar las vías y un ascensor". Las dos nuevas estaciones que se están construyendo se denominan "Tronador" y "Los Incas" y están ubicadas, bajo la avenida Triunvirato, entre Tronador y Estomba y entre Mariano Acha y Combatientes de Malvinas, respectivamente.

El segmento en construcción abarca 1,8 kilómetros, desde Lacroze hasta Los Incas. La intención es llevar la línea B hasta Villa Urquiza, pero, según confirmaron en SBASE, las licitaciones para estas obras están en stand by. Desde la otra cabecera (Alem), el Gobierno porteño planea llevar las vías hasta Puerto Madero, por lo que incluyó este último tramo en el proyecto de ley de ampliación de las redes de subte.

La otra construcción que marcha sobre rieles es la de una cochera en la terminal Congreso de Tucumán de la línea D. "En la cochera tenemos cuatro vías y dejamos preparado dos túneles que podrán extenderse en el futuro. De llevarse a cabo una extensión de la línea hacia la General Paz, dos vías se usarán como cochera y las otras dos para el transporte", puntualizaron en SBASE.

CUATRO NUEVAS LÍNEAS Y DOS AMPLIACIONES MÁS ESPERAN

Diferente suerte corren las obras contempladas en la última ley de ampliación de las líneas de subterráneo, sancionada el 9 de noviembre del año pasado por la Legislatura porteña. La crisis económica complicó la obtención del financiamiento necesario y los planes no avanzan de la manera en que el jefe de Gobierno hubiera imaginado al momento de pergeñar su estrategia de transporte bajo tierra. Como una señal de lo que actualmente sucede, en más de un discurso (entre ellos el que pronunció cuando inició el período de sesiones legislativas) Aníbal Ibarra afirmó que las prioridades de este año estarían vinculadas con la acción social. Sin embargo, también aclaró en varias oportunidades que las obras a mediano y largo plazo continuarían. "La intención está, pero los plazos de cumplimiento de las etapas de las obras no serán los planeados", pareciera ser la consigna.

Por tratarse de una obra de alto impacto ambiental, la norma de ampliación de los subtes requirió del procedimiento de doble lectura para su aprobación, con la realización de una audiencia pública entre ambas. El proyecto, presentado por el Poder Ejecutivo porteño, fue votado definitivamente con algunas pequeñas modificaciones en relación al texto se había aprobado por primera vez cinco meses antes, el 10 de junio.

Éste contemplaba la construcción de las líneas F, G, I y J, la ampliación de la línea B y la terminación de la línea H. En total, 70 kilómetros más de red. Para la línea F, la propuesta original preveía que, en una primera etapa, se construyera un tramo que uniera Constitución con Plaza Italia y que, en una segunda fase, se extendiera la línea hasta Barracas. En el caso de la G, se planeó vincular Retiro con la zona del Cid Campeador y luego prolongar las vías hasta Villa del Parque. Con el mismo esquema de dos etapas, se consideró llevar la línea I desde Emilio Mitre a Plaza Italia, primero, y desde allí hacia Ciudad Universitaria, después. En la segunda fase también se llevaría adelante la creación de la línea J para unir los barrios de Monserrat y La Boca, y la ampliación de la línea B (Lacroze-Alem) desde Alem hasta Puerto Madero.

Si bien, en rasgos generales, todo esto se mantuvo al aprobarse definitivamente la ley, una modificación realizada el día de su sanción fue no nombrar las cabeceras de las nuevas líneas. En lugar de eso, se enumeró los barrios por donde éstas últimas pasarían. La intención fue permitir futuros cambios al momento de hacer las obras, habida cuenta de que la norma consiente hasta un 20 por ciento de modificaciones en las trazas originales.

Esta medida surgió como consecuencia de las propuestas que entidades vinculadas al transporte y vecinos en general realizaron en la audiencia pública que se realizó el 14 de agosto. Por ejemplo, un proyecto denominado "REdDES", que planteaba el cambio del trazado de algunos de los recorridos propuestos por el gobierno de la Ciudad, para favorecer interconexiones con las redes ferroviarias y la llegada del subte a Barracas. Esta idea, que también promovía la creación de sistemas de tranvía y de ferrocarriles urbanos que se conectaran con la red general de subtes fue impulsada en la Legislatura por el diputado justicialista Eduardo Valdés.

Con respecto a la línea H, el tramo a terminar que figura en esta ley es el norte, que vincula el barrio de Once con Retiro. Se haría, a su vez, en dos etapas: Once-Plaza Francia y Plaza Francia-Retiro. El segmento sur, que irá desde Once hasta Nueva Pompeya, ya se encuentra en construcción bajo la órbita de SBASE. Actualmente se está realizando el segmento Once-Inclán.

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