En la sesión de este jueves, la Legislatura votó -a pesar de algunos desacuerdos parciales- la aceptación de la propuesta que llevará el Gobierno porteño a la asamblea de los tenedores del Bono Tango I, que se realizará el lunes 13 de mayo en Londres.
El jueves 25 de abril la Legislatura ya había aprobado una ley que le dio marco a la negociación entre el Gobierno y los acreedores externos, que culminará este lunes o el siguiente en Londres. Esto porque existe alguna posibilidad, no demasiado grande, de que las negociaciones se compliquen -cuando hay 500 millones de dólares de por medio nunca se sabe-.
Tanto la votación del 25 de abril como la de hoy fueron efectuadas a solicitud de la Banca Morgan y de la Banca Caboto -los agentes que colocaron el bono en Europa-, que se aseguraron de esta manera la aceptación de sus mandantes de los acuerdos que se firmarían el 13 o el 20 de mayo.
El diputado justicialista Alberto Fernández, economista, ex presidente de la Fundación del Banco Provincia de Buenos Aires, y uno de los hombres de la oposición que fueron consultados por los banqueros que representan a los acreedores, se mostró sorprendido por tener que volver a tratar el tema del Bono Tango I esta semana.
"La inesperada votación de hoy es el resultado de la pésima gestión del secretario de Hacienda-le expresó Fernández a NOTICIAS URBANAS-. Mi abuelo siempre decía que el que trabaja mal trabaja dos veces".
"La semana pasada nos pidieron que en 48 horas les resolviéramos la ley marco y lo hicimos, y ahora nos vuelven a pedir que les aprobemos la propuesta que van a llevar a Londres en 24 horas. Cada vez es peor. Esta actitud de Pesce se inscribe en la línea del tratamiento del Presupuesto del 2002. Los diputados no sabemos dónde están los ajustes que hicieron para este año, ni tampoco sabemos adónde está el Presupuesto".
La votación se efectuó, finalmente, a las nueve de la noche y arrojó un resultado de 38 votos a favor, tres abstenciones -las de los seguidores de Gustavo Béliz, lanzado a la arena de la competencia por el Gobierno porteño- y seis votos negativos. Éstos fueron los de los diputados de izquierda Alexis Latendorf, Vilma Ripoll, Jorge Altamira y Lía Méndez. El diputado aliancista Roy Cortina (PSP) se unió a los rebeldes y también votó en contra del Gobierno porteño.
Momentos antes de la votación se vivieron momentos de tensión cuando los diputados de izquierda exigieron que se les explicara en base a qué artículo del Reglamento Interno la mayoría necesaria para aprobar el acuerdo era de solo 31 votos y no -tal como planteaban ellos- una mayoría especial de 40 votos, es decir, de los dos tercios del total de los legisladores. La diputada Ripoll, incluso, subió al estrado de la presidencia e increpó duramente a Cecilia Felgueras que, algo asustada resolvió la situación llamando a un cuarto intermedio.
Una vez que la votación se resolvió en particular -la ley consta de un solo artículo de fondo, ya que el segundo es de forma- con casi las mismas cifras -solo el diputado belicista Miguel Srur, que antes se abstuvo, se había retirado, disconforme con el proyecto-, la sesión se levantó por una moción del presidente del bloque de la Alianza, Marcelo Vensentini.
EL VIAJE DE PESCE
El secretario de Hacienda y Finanzas, mientras tanto, se dispone -con un ojo en el avión y el otro en el recinto legislativo- a viajar al Reino Unido en el fin de semana, para asistir a la asamblea de los acreedores, a las 14 en Londres, que equivalen a las 9 de la Argentina.
Si bien el acuerdo con los tenedores está prácticamente arreglado, el viaje de Pesce sería necesario para el caso de tener que aclarar a los tenedores algunas dudas -que es muy probable que surjan- acerca de la difícil situación por la que está atravesando la Argentina.
