Desalojo y refacción en el Mercado de las Pulgas

Desalojo y refacción en el Mercado de las Pulgas

Finalmente, el Gobierno porteño determinó desalojar a los puesteros que ocupaban el Mercado de las Pulgas. Los trabajadores no opusieron resistencia. Enrique Rodríguez, ministro de Producción de la Ciudad, aseguró que el lugar, clausurado en enero pasado, será refaccionado para que pueda reabrir


Luego de varios meses de conflicto, el Gobierno de la Ciudad decidió desalojar a los puesteros del Mercado de las Pulgas. El predio ya había sido clausurado por malas condiciones de infraestructura. Enrique Rodríguez, ministro de Producción porteño, aseguró que el mercado será refaccionado y nuevamente habilitado para que los trabajadores, que no opusieron resistencia, puedan mantener sus puestos de trabajo.

El operativo policial comenzó a las 5 de este miércoles, con la presencia de personal judicial y del ministro Rodríguez. En total, la policía logró el retiro de 20 adultos y un bebé que vivían en el lugar. El Mercado de Pulgas, ubicado en el barrio de Colegiales, había sido clausurado en enero pasado con la resistencia de los puesteros. El mes siguiente, en febrero, hubo otro operativo más fuerte contra las personas que se negaron a irse. En el lugar, el pasado lunes Raúl Castells fue detenido por querer abrir un merendero.

"Se van a realizar obras para adecuar el edificio, ponerlo en condiciones para que los puesteros vuelvan al lugar y se convierta en lo que es: un paseo importante de compras para los porteños, pero planteado legalmente”, señaló el funcionario porteño a Radio Continental. "Los puesteros tendrán concesiones del Gobierno de la Ciudad. Nadie puede habilitar un puesto por su cuenta ni actuar arbitrariamente. No es posible que se vendan en forma mafiosa, que los puestos los adjudiquen capangas que creen que por su cuenta pueden adjudicar puestos. Queremos legalizar esa actividad para que sea productiva", agregó.

Sobre la clausura, Rodríguez insistió en que el predio fue desalojado porque "no existen condiciones de seguridad" al detectarse un peligro de derrumbe, y que "en el predio de al lado a los 190 puesteros se les permitió que continúen la actividad provisoriamente". Con relación a lo sucedido con Castells, afirmó: "(El piquetero) penetró ilegalmente. No puede ser que alguien quiera tomar el espacio público como propio, impedir el desarrollo de obras, de un barrio, y de una actividad productiva".

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