A las 11 de este miércoles 2 de octubre, un desocupado salteño se encadenó en el techo del asesor principal de la Legislatura porteña -que estaba detenido a la altura de la planta baja-. El hombre, de 53 años, quiso llamar la atención sobre la existencia de presuntos actos de corrupción en el manejo de los planes Jefes y Jefas de Hogar en el Departamento Candelaria, de la Provincia de Salta.
El hecho que provocó que el hombre se atrincherara con un cuchillo en la cara fue que en la intendencia de donde es oriundo le comunicaron que la administración central de los planes sociales les dio de baja a él y a otros 70 de sus compañeros. Pero cuando viajó a la Capital Federal para obtener una respuesta, le informaron que en el listado general todos figuran como si siguieran cobrando el beneficio. Por este motivo, él supone "que alguien va al banco y cobra por todos".
A partir de la llegada de los medios de comunicación, el líder del movimiento de desocupados salteños decidió bajarse del ascensor y brindar una conferencia de prensa en la Sala de Periodistas. En el incidente intervino personal de la comisaría 2ª y del SAME. Los efectivos policiales, mientras tanto, se ocuparon únicamente de alejar a los trabajadores de la Legislatura del lugar de los hechos.
Tras la conferencia de prensa, los diputados porteños Vilma Ripoll (izquierda Unida) y Fernando Caeiro (Unión Cívica Radical) se encargaron de gestionarle una entrevista con funcionarios de la Casa de Salta. Además, el personal medico del SAME le realizó un chequeo general para evaluar su estado de salud.
La elección de la Legislatura como lugar para llamar la atención fue casual. El hombre pasó por allí y entró, subió las escaleras sin llamar la atención y desde allí saltó al techo del ascensor principal, desde el cual saltó posteriormente a las menos peligrosas páginas periodísticas.