El kirchnerismo decidió bajar los decibeles en su pelea con el ibarrismo luego de las declaraciones realizadas por el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, en respaldo al presidente de la Nación, Néstor Kirchner en la negociación -y pelea con Felipe Solá- por la Ley de Coparticipación Federal.
Por lo tanto, el bloque Frente para la Victoria decidió no insistir con el proyecto por el cual solicitaban la interpelación del jefe de Gabinete, Raúl Fernández, y de la secretaria de Hacienda, Marta Albamonte, y apoyar, en cambio, un proyecto de la diputada María Soledad Acuña que, de aprobarse, implicaría, implicaría que tanto Aníbal Ibarra como su jefe de Gabinete, Raúl Fernández, tengan que brindar explicaciones concurriendo regularmente a la Legislatura de la Ciudad, cada seis meses el primero y cada tres el segundo.
Fuentes del bloque kirchneristas afirmaron a este medio que "las diferencias con Ibarra persisten pero tuvo un gesto con el Presidente y por eso no vamos a insistir con el proyecto".