Buenos Aires está bajo alerta de calor por las altas temperaturas, que pueden ocasionar decaimiento, dolores de cabeza, deshidratación, hipotensión (baja de presión arterial) y náuseas. Por ese motivo la Secretaría de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires emitió una serie de recomendaciones para su prevención.
Puesto que el golpe de calor puede afectar a personas de todas las edades se debe tener especial cuidado con los niños y ancianos. En caso de malestar se debe beber abundante líquido, sobre todo agua y jugos de frutas naturales, como así también no ingerir bebidas alcohólicas.
El uso de ropa liviana -preferentemente de colores claros- contribuye a enfrentar mejor el agobio de las altas temperaturas, como también el permanecer en lo posible en ambientes frescos y ventilados.
Las horas más duras son entre las 11 de la mañana y las 3 de la tarde. En este sentido se recomienda evitar ejercicios físicos y caminatas en estos horarios.
Además, dormir suficiente cantidad de horas puede mejorar la sensación de agotamiento. También ayuda comer frugalmente, en especial una dieta rica en frutas y verduras frescas; y no ingerir alimentos con gran cantidad de sal, sin consultar antes con su médico.
Por otro lado, se deben tomar mayores precauciones con los pacientes que sufran hipertensión arterial, insuficiencia cardíaca, diarreas, lesiones de piel o toda enfermedad que favorezca la deshidratación, al igual que medicamentos tales como diuréticos, laxantes, etc.
En caso de aparición de síntomas tales como dolores de cabeza, mareos, fiebre, deshidratación o diarrea, se debe consultar al médico o concurrir al Hospital o Centro de Salud más cercano.
