El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Aníbal Ibarra, junto al Secretario de Obras y Servicios Públicos, Abel Fatala, y a autoridades del Ejército Argentino, supervisó el sostenido avance de las obras de demolición que se están realizando en la ex Cárcel de Caseros.
Cabe destacar que a partir del convenio firmado entre el Gobierno porteño y el Ejército Argentino para realizar las tareas en conjunto, el estado actual de las obras en el edificio de la ex Cárcel de Caseros denota importantes avances. El Jefe de Gobierno porteño subrayó: ?Es una buena noticia ver el avance de las obras de demolición de la ex cárcel de Caseros, y no solo para los vecinos de Parque Patricios sino para todos los porteños, que tendrán un nuevo espacio verde, viviendas, una escuela y un centro cultural y comercial.?
Actualmente, se está ejecutando la remoción del amianto (asbesto) por parte del personal de la Compañía Química Biológica y Nuclear del Ejército Argentino. Ibarra agregó: ?Por primera vez en nuestro país se está realizando el proceso de acuerdo a todos los requerimientos internacionales de seguridad. Esto es muy importante porque el amianto es uno de los elementos más tóxicos.?
Se construyó un cerco perimetral de 714 metros y se retiraron aproximadamente 350 rejas. Fueron desmontados y demolidos la totalidad de los cielorrasos y los caños de servicios del primer piso, planta baja, primer y segundo subsuelo, tanto del sector administrativo como del edificio en torre. También se extrajo la membrana asfáltica y se demolieron las losas y fue desarmado todo el sector de carnicería, cocina y panadería.
Se retiraron todos los escombros (aproximadamente 3.500 metros cúbicos) y se extrajo todo el fuel oil derramado así como el que se encontraba mezclado con agua en la cisterna (81.000 litros). Se ejecutó la remoción de los sólidos contaminados y el fuel adherido al solado. Después de estas tareas se obtuvo el Certificado Libre de Gases.
Ibarra concluyó: "En poco tiempo más se termina la segunda etapa y entraremos en la tercera y definitiva, que se concluirá el año próximo. Después de décadas de abandono, los vecinos del sur podrán gozar de los beneficios de una mejor urbanización de su barrio, de mayor seguridad y una mejor calidad de vida".