Este viernes, 1.750 clientes del Microcentro porteño de la empresa Edesur amanecieron sin luz, debido a que un cable alimentador de Media Tensión de la Subestación Charcas quedó fuera de servicio. El hecho ocurrió a las 5:50 y afectó a las usuarios hasta las 8:30. En tanto, a las 6:30 se registró la rotura de un cable alimentador de Media Tensión de la Subestación Pozos, que afectó aproximadamente por dos horas a 650 clientes de Once.
Por otra parte, a raíz de la caída de cuatro torres de 500 kilowatts de la transportadora eléctrica Transener -dos en el trayecto que va desde Henderson hasta Ezeiza y otras dos más desde Abasto hasta Olavarría- más de 200 mil usuarios de la provincia de la Pampa, del Gran Buenos Aires y de la Ciudad de Buenos Aires se quedaron sin luz desde las 20:27 hasta las 20:58. Este último incidente, que pudo haber sido un atentado, no es competencia de Edesur, debido a que lo que falló fue el Sistema Argentino de Interconexión (SADI).
Todos estos cortes de luz se suceden en momentos en que las empresas encargadas de la distribución eléctrica en la zona metropolitana elevaron a la Comisión Renegociadora de Contratos de Servicios Públicos del Gobierno Nacional sus intenciones de aumentar las tarifas hasta un 30 por ciento. Las compañías afirman que esta cifra es "la necesaria para recomponer los ingresos de caja que permitan sostener la operatoria".