La gestión del ministro de Salud porteño, Jorge Lemus, ha sido fuertemente cuestionada en los últimos días. A la falta de insumos hospitalarios, los problemas edilicios en las unidades sanitarias, los conflictos laborales con residentes y concurrentes, y las dudas sobre un plan de salud mental que no se implementa adecuadamente, se sumaron también las críticas por el sistema de selección de directores y subdirectores de hospitales que tomó estado público tras el desplazamiento del ex director del Hospital Argerich, Donato Spaccavento.
?Se ha llamado a la renovación de los interinatos por concurso. Nosotros pensamos que los directores de los Hospitales deben entrar por concurso, no por política. Spaccavento se presentó a concurso como los demás. Se presentaron más de cien personas que querían ser directores de los 33 hospitales. Spaccavento no estuvo dentro de la lista de los elegidos porque hay ciertos requisitos para ser director?, describió Lemus.
Desde la oposición porteña, se aseguró que separación de Spaccavento de su cargo se debió a una intencionalidad política, que el denominado concurso era una selección digitada y remarcaron que el ex Director del Argerich tenía un currículum más que suficiente para ser mantenido en funciones.
Respondiendo a todos esos cuestionamientos, el Ministro subrayó: "Si nosotros hubiéramos querido echar a Spaccavento lo hubiéramos hecho antes. La Ministra Ocaña es una excelente Ministra de Salud pero no podría ganar nunca el puesto para ser directora del Argerich porque le faltan requisitos, no es una critica, ella como Spaccavento tuvieron varios cargos porque fueron puestos políticos, sin desmedro de ello?.
En relación a la situación concreta que se vive diariamente en los hospitales públicos porteños, Lemus destacó que cuando asumió la gestión macrista "había atraso en infraestructura, tecnología, insumos y recurso humano?, que "el sistema de salud estaba al borde del colapso" y que se encontraron con "deudas de agosto impagas" que tuvieron que ser cubiertas "con el presupuesto 2008".
"Por esta deuda los hospitales habían quedado sin stock, además la administración centralizaba las compras a través de una empresa que era muy ineficiente?, dijo Lemus por FM Global Station. Y agregó: "También encontramos un sistema de nombramientos desfinanciados, esto nos trae problemas de recurso humano, nosotros centralizamos las compras. Hubo un periodo de transición porque a esto se le sumaba una decisión de la Legislatura de no usar más la compra por el fondo de emergencia, que se reemplazó por otro sistema más rápido. Reconocemos que puede faltar algo porque el sistema es nuevo?.
Finalizando, manifestó que la "infraestructura está colapsada", que "hay dos hospitales que hay que hacerlos a nuevo, el Rivadavia y el Muñíz", que al Rivadavia "no conviene rehabilitarlo por sectores porque tiene casi 100 años" y que "se van a hacer 20 centros de salud nuevos" que ayudarán a descomprimir el servicio de los 33 hospitales que posee la Ciudad.
También destacó que en lo que va del año, en los hospitales porteños se realizaron "4 mil cirugías más que el año pasado" y se atendieron "60 mil pacientes más".
"Tenemos que tranquilizar a la población, no estamos desabastecidos", concluyó.