El secretario de Hacienda porteño, Miguel Ángel Pesce, anunció que la recaudación impositiva del mes de julio fue un dos por ciento menor que la del mismo mes del año pasado. Pesce contradice de esta manera el pronóstico optimista que hacía en febrero de este mismo año, cuando anunciaba que en el curso del 2001 la recaudación aumentaría el 3 %. En aquellos días, Pesce no se privaba de darle una mano al gobierno nacional, al atribuir el aumento de la recaudación al blindaje financiero que terminaba de lanzar el gobierno, así como a la "convocatoria del gobierno de De La Rúa a consumir más".
Lo que va de ayer a hoy
Pesce atribuyó la baja en la recaudación a la disminución en el consumo: menos autos nuevos, menos ingresos brutos y muchos morosos en el Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL). Además, ahora Pesce calificó a las medidas que lanzó el gobierno de De La Rúa el 11 de julio pasado como "recesivas".
Aunque el secretario reiteró que no se producirá la quita del 13 % sobre los salarios de los trabajadores del gobierno porteño, recordó que la ciudad viene implementando desde enero de este año un programa de austeridad que significará un ahorro de 200 millones de pesos. Aún así, la disminución en la recaudación producida en julio estaría marcando -según el funcionario- que este año se recaudarán 65 millones de pesos menos que el año pasado.