?Una eternidad.? Esa es la primera frase que sale automáticamente desde la boca de cualquier funcionario u operador del Pro cuando se le pregunta por las aspiraciones y proyecciones presidenciales de un emblema compuesto apenas por dos palabras: ?Mauricio 2015?. Y, si bien es cierto que en el panorama político argentino todo puede cambiar en milésimas de segundos, lo cierto es que hablar de ?eternidad? es apenas una frase hecha para escapar hacia adelante.
Sin embargo, hay datos concretos que indican que 2015 está más cerca de lo que parece: ?Hay que decirlo, por más que se hable tanto de un acuerdo Pro-Kirchnerismo, por más que digan lo que quieran decir, Mauricio quiere ser presidente. Casi podría decir que su desembarco en Boca y después de lleno en la política fueron por eso?, confía ante Noticias Urbanas una fuente de primera línea, cercana al líder del partido.
Aún así, admite que la noticia difundida el martes a la noche, de que a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner le extirparán un carcinoma en la glándula tiroides, dejó a toda la mesa chica del Pro en una pausa al menos en lo inmediato: ?Desde el ?soy responsable de construir una alternativa? hasta el ?nos conmociona a todos, nos tomó por sorpresa? hay mucha agua debajo del puente. Por eso cuando la arena es así de movediza, ¿cuánto se puede prever??, inquiere la misma fuente al ser consultada.
Previsible o no, lo cierto es que apenas un día después de Navidad, Macri dijo que se siente ?responsable de construir una alternativa? al kirchnerismo ?para 2013 y para 2015, sobre todo?. Desde su mesa de trabajo aseguran que hasta está contento con la baja performance de los opositores a escala nacional ya que con una UCR debilitada, un duhaldismo que se fue por la puerta chica apelando a la ya vieja y conocida denuncia de fraude y una Coalición Cívica casi extinta, el terreno se abriría mucho más fácilmente. Casi podría decirse, a pedir de Macri.
Emilio Monzó, flamante ministro de Gobierno y encargado del armado a escala nacional declara a NU que ?la opción de Mauricio 2015 es inamovible?. Y enseguida explica: ?Con la figura de Mauricio tan bien posicionada como está y las encuestas que manejamos, estamos en condiciones de asegurar que la gente lo ve como la alternativa para las próximas elecciones?.
?Aunque cueste creerlo, la imagen de Macri es alta hasta en el pueblo más chico y alejado de la Capital. Lo que hay que construir es volumen político territorial, dirigentes a la altura de la imagen de él. Pero la instalación está dada de punta a punta. Ése es su principal activo y nos da optimismo. Nos faltarían actores en los lugares más postergados que tengan arraigo en la gente?, detalla.
Es que, a escala nacional, la figura de Macri creció más que el volumen partidario, y ahora desde el Pro buscan complementar y creen que con trabajo, todo es posible. Ni siquiera temen al término ?aparato?. ?Los aparatos están finiquitados, producto de los nuevos medios que cambiaron el escenario político. La gente, mayoritariamente, se informa en el living de su casa y en ese sentido el Pro tiene una herramienta de comunicación dirigida por Marcos Peña que es, lejos, la mejor a nivel país, y esto llevó a Mauricio a que sea una figura con connotación nacional; trascendió y mucho la General Paz?, asegura Monzó.
Un dato que además alienta es que intendentes tradicionales están perdiendo o al borde de la derrota. ?La gente se educa, evoluciona, quiere cambios y busca una alternancia más rápida?, asegura, y en contraposición se alegra de que sean una fuerza nueva. ?No hay carga, no tenemos un pasado que nos condene?, bromea.
Gremios, militancia, chicanas & cia
En este escenario, y siempre hipotéticamente, ¿cómo se relacionaría Mauricio Macri con Hugo Moyano en caso de ser presidente? ¿De qué manera lanzará su campaña? ¿Cómo lidiará con lo que desde su equipo denominan ?la vieja política??
?Al país hay que gobernarlo con gremios, empresarios y todas las fuerzas que pueda tener enfrente un gobernante de turno, y hay que tener integralmente en cuenta a estos factores de poder. Si se los excluye políticamente, no hay político ni poder que aguanten?, desafía Monzó, y agrega que manejar el país para Macri ?es lo mismo que Boca o la Capital, donde fue históricamente exitoso?.
?Esto de ser más político y menos gerente son adjetivos que se usan para descalificar. Solo con la política chanta y mentirosa? así no es. A mí me gusta que se maneje como empresario, el mote no debe ser descalificativo cuando se prioriza y optimiza el manejo de los recursos?, señala. Y añade: ?Mauricio busca la equidad, la justicia social. Esos valores los tiene y los combina con los valores empresariales y eso lo vuelve un ejemplar único?.
Respecto de la campaña propiamente dicha, desde el Pro aseguran que ?un político siempre está en campaña?. Las etapas sin embargo son, en primer lugar, una buena gestión en la Ciudad, luego generar acercamiento y confianza con dirigentes políticos a escala nacional.
?No se pueden hacer cosas desesperadas porque ya se ve cómo terminan. Miren a Alfonsín y De Narváez?, sentencia Monzó, quien señala como el punto más fuerte el conocimiento a nivel país ??un trabajo arduo, más la experiencia de gestión de la que salió fortalecido?? y como el más endeble a la debilidad que genera ser un partido joven, con poco tiempo en las pistas políticas y necesitado de acuerdos.
?Aunque no me preocupa el folclore de los fiscales que se avivan y tocan las urnas o las planillas, porque eso, si pasa, pasa poco y no altera toda una elección. La mejor excusa para el que pierde siempre es decir que hubo fraude?, desafía Monzó, conocedor de las trapisondas a la hora de escrutar. En cambio, tiene palabras de elogio para la juventud kirchnerista y para la propia, y las tilda como las más dinámicas y entusiastas del país: ?Allí está el futuro de la política?.
Con todo este panorama, ¿qué podría interponerse entre Macri y el sillón de Rivadavia? La respuesta sale desde el mismo riñón del Pro: ?Amado Boudou?. ?Amado es el único que puede competir y no veo mucho más. Hay que ver cómo juega Mariotto en provincia pero antes, creo, en pocos meses, vislumbro una gran interna en el PJ entre kirchneristas y no kirchneristas. Esto también será definitorio.?
Sumar, esa es la consigna
A principios de semana, el Jefe de Gobierno recordó, casi como una advertencia: ?Desde la primera semana después de ganar la elección de la Ciudad ya empezamos a trabajar con los equipos. Estamos trabajando en la construcción de esa alternativa, que es mucho más que ser opositor?.
Y esto está en sintonía con lo dicho, entre globos y papel picado, cuando hace menos de seis meses anunció que se bajaba de la presidencial y que iba por la reelección porteña.
En ese entonces, NU habló con algunos ministros de primera línea, quienes coincidían en que ?de ninguna manera? dejarían ?de competir por ser una opción nacional?. Con una suerte dispar al momento de presentarse el Pro a escala nacional, sostener la imagen de un Macri cercano no sólo a los porteños parece ser uno de los desafíos más grandes.
Ni qué hablar de las propias internas dentro del macrismo, donde las viejas diferencias entre Rodríguez Larreta y Gabriela Michetti son apenas un telón de fondo. Detrás se mueven el mismo Monzó, recién llegado al distrito, enfrentado con el ya histórico Álvaro González. Aunque algunos se hayan ?comido? su renuncia, no conocen a este exlegislador, acostumbrado a correr maratones, que jamás abandonaría en los primeros 100 metros.
Es que González es uno de los políticos Pro que ya cumplió en su dilatada trayectoria tanto roles federales como porteños, ejecutivos y legislativos: está probado en la cancha. Fundamental en la performance de Del Sel en Santa Fe, González le resta toda importancia a la interna que se vende.
?Somos dos personas grandes, tenemos una misión y veremos cómo la llevamos a cabo. Eso es lo importante y para lo que nos preparamos todo este tiempo. Cada uno sabe lo que puede dar. Los que conocemos la Ciudad y gestionamos con Mauricio tenemos la ventaja de ocho años de trabajo juntos?, asegura González.
Aquí se da el caso típico de Macri que siempre pone a un pesado debajo de otro Pro más liviano para darles chapa a los suyos, pero protege el poder con los expertos en la gestión, que casi siempre vienen del peronismo.
Más allá de las peleas de cartel y de poder, Macri fue claro cuando en el coqueto brindis del Buenos Aires Design remarcó: ?Si queremos gobernar la Argentina, tenemos que trabajar más?.
?Monzó tiene la función de vender al interior la gestión Ciudad. Ya mantuvo encuentros con algunos gobernadores oficialistas del norte del país porque la clave es ser inclusivos, sumar para 2015?, dice luego a Noticias Urbanas el asesor de otro hombre clave en la estructura Pro que, precisamente, llegó desde el norte a sumarse a las filas macristas.
?Ya hay ministros que mantuvieron encuentros y que van a estar sumándose y contribuyendo desde su lugar al trabajo del armado nacional. No es casual tampoco que algunos intendentes se hayan visto en la asunción de Macri, que Barletta (flamante presidente de la UCR) diga que no ve mal trabajar con el Pro. Creo que se está entendiendo el llamado de Macri de que la oposición se encolumne tras una propuesta?, confían ante este medio.
Más allá de la idea de aglutinar, en el Pro no son pocas las voces que sostienen que Duhalde, Carrió y Alfonsín perdieron en 2011 la oportunidad de 2015 y en ese sentido salir a captar y encolumnar es, cuanto menos, auspicioso para un armado territorial tan necesitado. Aunque, aclaran,: ?No seremos una fuerza de reciclaje de duhaldistas y radicales. Nada que ver?.
Las recorridas, según pudo saber Noticias Urbanas, parten desde el Conurbano y viran a Salta, Tucumán, Córdoba y Mendoza en una primera instancia. Una estrategia que tanto Marcos Peña como Durán Barba ya habían delineado y que fue rechazada al principio.
Claramente, serán lugares para hacer pie Vicente López, con Jorge Macri; Malvinas Argentinas, con Jesús Cariglino, y Lanús, donde Grindetti mueve a su gente pese a no haber alcanzado la victoria. ?Puede haber sorpresas en La Plata?, deslizan. Y con números en mano enumeran: Cristina, Scioli, Macri, Michetti y Mazza son actualmente los cinco políticos con mejor imagen a escala nacional.
Todo está haciéndose y, a la vez, todo está por verse. El tablero se mueve constantemente. Aunque hay una directiva que, al menos por ahora, será infranqueable: ?Hablar de la sucesión porteña está prohibido; sólo poner el foco en la gestión y en las soluciones a los vecinos, porque ahí otra vez aparecen los quilombos?, se sinceran ante Noticias Urbanas.
Y como último dato, la fuente subraya: ?No se olviden de Gabriela Michetti. Mide bien, ya lo acompañó a Mauricio una vez?. De aquí, hasta la ?eternidad? de 2015, la bandera de largada ya flameó y así arrancan.