Homenajearán con un acto a los próceres de la independencia, Juana Azurduy y Manuel Ascencio Padilla, con motivo de cumplirse un nuevo aniversario del nacimiento de este último. El evento se llevará a cabo en la intersección de Juana Azurduy y Avenida del Libertador, Capital Federal, y consistirá en la colocación de una placa alusiva.
El impulsor de la iniciativa es el diputado porteño Fernando Finvarb (ARI) quien declaró que "ambas figuras históricas sintetizan la entrega, la generosidad y el heroísmo con el que se brindaron a la lucha revolucionaria miles de personas de nuestros pueblos"
El diputado Finvarb declaró que "la iniciativa de realizar este homenaje nos fue acercada por el Dr. Oña Heredia, secretario de Cultura de la Federación Integrada de Entidades Bolivianas (FIDEBOL), quien a su vez nos aportó sus conocimientos" y recalcó que "elegimos esta fecha para realizar el reconocimiento, el día del nacimiento de Padilla, como un modo de realzar su figura frecuentemente opacada, en lo que a memoria se refiere, por la figura de su esposa quien fuera objeto de múltiples reconocimientos, como la edición de un sello postal con su efigie y los versos que inmortalizara Mercedes Sosa".
"En los tiempos de la globalización consideramos que reviste una importancia estratégica y política de magnitud la recuperación de la conciencia de los valores comunes que nos unen al resto de Latinoamérica" dejó expresado el diputado. "Otra circunstancia que nos impulsa a proponer este tipo de actos – agregó – es la preocupante tendencia xenófoba que se comienza a advertir en ciertos sectores de la sociedad, alentada por cierta prensa y, lamentablemente, algunos políticos".
Un poco de historia
Juana Azurduy y Manuel Ascencio Padilla participaron activamente en diferentes batallas de la guerra de las Republiquetas, librada entre los años 1811 y 1816 en el Alto Perú, en territorio actualmente boliviano. En esas guerras, los territorios que estaban en manos de los patriotas cayeron vencidas por los ejércitos realistas. La importancia de esas batallas en el norte de nuestro país fue fundamental porque ayudaron a hacer posible la independencia de América, al mantener libre el territorio platense, del que surgieron los ejércitos libertadores del General José de San Martín.
Manuel Ascencio Padilla – quien nació el 28 de Septiembre de 1774 en una provincia del Alto Perú – también participó en las batallas de Tucumán y Salta al mando del General Manuel Belgrano. Su arrojo y su lucha les valió a Juana Azurduy y a su esposo el reconocimiento del gobierno del Río de la Plata, que les asignó los grados de Teniente Coronela y Coronel respectivamente.
El reconocido escritor e historiador, Félix Luna, los elogia al igual que el diputado "Pacho" O’Donnell en su libro "El Grito Sagrado"."Durante los años que demandó la lucha, perdió a sus cuatro hijos y a don Manuel, y vivió el destierro, el intento de soborno, la traición, la miseria y el olvido de su patria. Se sobrepuso sólo para cumplir con el compromiso que había asumido con su gente" expresó sobre Juana Azurduy en sus escritos, el historiador Luna.