Los plazos apremian para la definición si va a haber o no elecciones en el peronismo de la Capital. El cronograma no permite estirar más los tiempos, es por ello que la Jueza Federal María Romilda Servini de Cubría hizo lugar al pedido del fiscal y convalidó la continuación de la compulsa interna de esta fuerza política. Los principales sectores involucrados, el de Gustavo Béliz e Irma Roy y el del taxista Omar Viviani junto al empresario Pablo Challú (con el aval de Grosso y de Moyano) empezaron a calentar motores desde el pasado viernes cuando trascendió el dictamen del fiscal. El interventor sanjuanino Jorge Escobar que venía amenazando con renunciar si no era garantizado el comicio cumplió su palabra ese mismo día. La pregunta entonces era por qué.
Paralelamente – y obviamente este dato era conocido por el interventor – existían desde sectores menemistas intentos de desplazarlo por la justicialista mendocina Ana María Mosso, diputada nacional, que se especula que llegará a ese cargo con la intención de evitar el comicio y forzar una lista de unidad. Ese intento ya fracasó más de una vez, por la férrea voluntad de Béliz y de Roy de no aceptar al actual diputado Daniel Scioli (el verdadero nombre de la unidad) en sus listas. Al decir del gobernador bonaerense Carlos Ruckauf, Scioli es un buen candidato pero "le tengo que ganar a alguien en la Capital" y sin contrincante fuerte, el supuesto triunfo perdería brillo.
Lo que no queda claro es quién recibirá el oficio judicial hoy en el PJ porteño ya que Escobar cesó en sus funciones y todavía no está designado su reemplazo. Mosso, al decir de los belicistas, es un hueso duro de roer "refiriéndose a la temperamental diputada y su pronóstico es por lo menos reservado. Algunos la ligaron en una época al ministro Cavallo, aunque siempre desde el justicialismo. Ella, por ahora, mantiene un prudente silencio.
Por otro lado, desde la principal lista opositora de Viviani y Challú afirman que esta situación puede "definitivamente sacarle la careta a Béliz en su decisión de competir por afuera, él nunca quiso la interna ". La incógnita será develada muy rápido, los tiempos y la novela no dan para más.
