El senador bonaerense Eduardo Sigal, uno de los principales referentes del santacruceño en ese distrito, dijo que “no es cierto que la dirección nacional del Frente Grande haya definido su apoyo a alguna candidatura para las próximas elecciones presidenciales”.
“Así como Ibarra se pronuncia a favor de Carrió, yo hace más de un año apoyo a Kirchner sin que eso defina el posicionamiento del partido”, afirmó Sigal, aunque admitió que “en este contexto son legítimas las preferencias electorales de los distintos dirigentes frentistas”.
Posteriormente sostuvo que “en el último Congreso partidario se decidió avanzar en acuerdos programáticos con aquellas fuerzas políticas que intenten recomponer la unidad de un espacio nacional, popular y progresista”.
Sumándose a la algarabía, el diputado provincial Aldo San Pedro destacó que “el entendimiento con Kirchner parte del armado de un frente nacional, popular, progresista y racional” pero aclaró que “se trata de un proyecto político serio y no tiene nada que ver con el amontonamiento de dirigentes que sólo quieren poder”.
“Después de la frustración que generó la Alianza, es hora de ponernos a trabajar para terminar con esta Argentina de la exclusión, la desocupación y la pobreza”, remarcó el ex presidente de la Cámara de Diputados de Buenos Aires en tiempos del gobierno de Fernando De la Rúa.
En el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires, por su parte, el legislador porteño y jefe de campaña de Kirchner, Alberto Fernández ha sido hasta ahora el responsable de sostener el contacto con Aníbal Ibarra y otros dirigentes frentistas en el distrito.
Fernández, algo desconcertado, manifestó que “en el proyecto de Kirchner no hay lugar para especulaciones coyunturales ni para pedir gestos de grandeza a los demás”, al tiempo que agregó que “la adhesión a un proyecto de país no se hace mediante operaciones de prensa”, aludiendo a las manifestaciones de Ibarra.