El Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad falló a favor de una presentación realizada por la Unión de Músicos Independientes (UMI) y declaró la inconstitucionalidad de tres artículos de la ley que regula las actuaciones en vivo. Dicha resolución judicial fue tomada como un triunfo por los músicos luego de lo sufrido por la actividad luego de la tragedia de Cromañón.
El máximo tribunal porteño, presidido por José Casás, declaró la inconstitucionalidad del artículo 15 que establecía que en "un local sólo podían presentarse hasta un máximo de 5 artistas", y varios incisos del artículo primero, donde se reclamaba a los músicos que informaran sobre la naturaleza y descripción del espectáculo, número de personas que participarán de la función, nombre de la banda que ejecuta, no pudiendo contar con un reemplazante.
También se cuestionó la imposición a los locales y clubes barriales de "un permiso especial que incluya un cronograma anual que detalle todas las actuaciones con horarios de inicio y finalización", por considerar que es imposible de establecer inclusive para los grandes productores de espectáculos internacionales.
De acuerdo a lo resuelto por el Tribunal Superior, la Legislatura porteña deberá reformar dichos artículos y convocar a los músicos de todos los géneros para establecer los alcances de la nueva norma.
Durante una conferencia de prensa brindada por los músicos Diego Boris, Diego Vainer y Cristian Aldana durante el Cosquín Rock, se presentó la copia de la resolución judicial y aseguraron que el fallo es "histórico, inédito e inapelable" y que será muy útil para reformular la actividad musical en la Ciudad.
"Esperamos que se nos convoque para aportar nuestras propuestas, que las hemos elaborado hace tiempo, y que no se pretenda legislar contra la actividad o como si la cultura fuera algo peligroso", expresó Diego Boris. Y agregó: "Somos una generación de roqueros que se hace cargo de un problema actual y lo enfrenta con soluciones, no pateamos la pelota y le dejamos el problema a las futuras generaciones. Por eso tenemos propuestas para la nueva normativa".
Por su parte, Vainer resaltó que "la normativa considerada inconstitucional era absurda y proscripta, porque después de Cromañón hubo persecución contra el rock y se prohibió la presentación de las bandas" y Cristian Aldana subrayó que el fallo reconoce a "la UMI como parte legítima para representar al sector".