La Dirección de Salud porteña ordenó esta tarde, en forma urgente, a todos los hospitales porteños que se nieguen a entregar "cualquier tipo de información que pueda significar un elemento de prueba" en la causa que investiga la jueza María Servini de Cubría, informó un funcionario del gobierno de la Ciudad y agregó que la "orden" fue dada -preventivamente- en forma telefónica.
La medida se debe a que entre el viernes y el miércoles, miembros de la Policía Federal recorrieron los hospitales porteños para recabar elementos probatorios como "balas y cápsulas" en nombre del juzgado federal. Pero, según fuentes consultadas, esa potestad sería exclusiva de los funcionarios judiciales y estaría prohibida para la Policía Federal.
En el hospital Fernández, dos policías solicitaron -sin éxito- a las autoridades que les entregaran la bala extraída a un joven que recibió un disparo en la espalda durante los incidentes del jueves. Además, en la sede de la morgue judicial, en Viamonte y Junin, se habrían entregado cápsulas y balas a miembros de la policía. También en los hospitales Argerich y el Santojani, habría ocurrido lo mismo, aunque esta versión no pudo ser confirmada.
El sábado por la mañana, tres policías concurrieron al domicilio de un joven que trabaja en un servicio de mensajería en moto y que resultó herido cuando la policía reprimió una manifestación de "motoqueros" el viernes pasado. Según los testigos, los policías se identificaron como miembros de la comisaría 29ª y afirmaron que buscaban al joven por un robo de electrodomésticos, hecho que fue desmentido por sus familiares. Posteriormente, los oficiales intentaron ingresar por la fuerza, pero no tuvieron éxito y debieron retirarse con las manos vacías.
Por otra parte, en el Sanatorio Quintana, algunos policías federales solicitaron a los familiares de varios internados por las protestas del jueves que se apersonaran en el juzgado federal para declarar en la causa. Según comentó a Noticias Urbanas un familiar de uno de los jóvenes, que prefirió no dar a conocer su nombre, "la policía me pidió que vaya a declarar el miércoles pero yo aún no tengo abogado".
La compulsiva solicitud de la Federal sería a una táctica para aprovechar el desconcierto actual de los familiares de las víctimas. Hasta el momento, cerca de siete personas continúan internadas en estado grave en los hospitales Santojanni, Ramos Mejía y Argerich. El resto de los 178 heridos fueron dados de alta en los últimos días.
