El flamante ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Beliz, anunció este jueves que va a desarrollar una política de "inteligencia en materia criminal" en las villas de emergencia de la Ciudad de Buenos Aires, para individualizar a las bandas que operan en cada zona.
Además, el ministro adelantó que esta línea de acción estará acompañada de una política social, que será complementada con la radicación de una serie de fiscalías, siempre en las cercanías de las villas.
El diputado porteño Ricardo Busacca (Popular Cristiano), que integra la Comisión de Seguridad de la Legislatura, opinó que "todo lo que coadyuva al mejoramiento de la seguridad en la Ciudad de Buenos Aires es bienvenido, pero es necesario que Gustavo Beliz se convierta en el ministro de Justicia y Seguridad de la Nación y no sólo de la capital. Su propuesta, en este caso, sólo ataca las consecuencias y no las causas de la inseguridad".
"Lo que ocurre en Buenos Aires -adujo el legislador- es la causa de la falta de políticas de seguridad que hubo en los últimos diez años, en los que no hubo políticas de prevención".
De todos modos, Busacca disiente con el ministro en un punto. "La formulación del proyecto contiene un acto discriminatorio. No todo el que vive en una villa es un delincuente. Existe -tal como lo dijo hace unos pocos días el presidente Kirchner- el delito de guante blanco, que se desarrolla lejos de la villa. Planteada así, ésta sería una medida falaz, que no bajaría el índice del delito".
El diputado Jorge Mercado (Movimiento Generacional Porteño), por su parte, planteó a NOTICIAS URBANAS que "la única forma de prevenir el delito es desarrollar una fuerte tarea de intreligencia y también estoy de acuerdo con la instalación de las fiscalías".
"Es verdad -agregó el parlamentario- que el delito organizado suele involucrar a los sectores marginales, que se vuelven vulnerables empujados por la necesidad. Esto hace que toda política de seguridad deba poseer un fuerte contenido social".
De todos modos, el legislador no se privó de dispararle a las piernas al ministro. "Beliz es un soberbio, que cree que puede salvar solo a la ciudad. Yo tengo tres proyectos vinculados con el tema para presentarle, pero el ministro no quiere atenderme, solamente por razones partidarias".
El legislador Roque Bellomo (Fuerza Porteña) está de acuerdo con el ministro en que deben instalarse las fiscalías "no cerca de las villas, sino por toda la ciudad. Estoy de acuerdo también -se explayó socarronamente- en que no nos vendría mal un poco de inteligencia. De todos modos, no quiero prejuzgar con respecto a este tema, porque el gabinete de Kirchner es bastante plural, por lo que esperaré para declarar a que actúe".
La opinión del diputado Eduardo Peduto (ARI) fue más crítica. "No conozco los detalles del proyecto, pero pareciera ser que los que se refieren a la prevención de esa manera, rozan el concepto de la represión".
"Las políticas sociales que es necesario desarrollar en las villas deben incluir a la educación, la defensa del trabajo y la salud. Además se deberían urbanizar los asentamientos y se debería tratar a los villeros como lo que son: ciudadanos de primera", finalizó el diputado.