"Una vez más el Parque de Agronomía ve amenazada su existencia ante la acción irresponsable e ilegal de los decanatos de Agronomía y Ciencias Veterinarias, que durante los últimos días del mes de mayo han talado cuatro ejemplares de tipas centenarias, sin que se evidencie la necesidad arquitectónica o de control de sanidad vegetal que pueda justificar tal intervención", denunció la diputada porteña Ana María Suppa (Frente para la Victoria).
Suppa afirmó que "sería interesante conocer los motivos de semejante decisión, que es a todas luces ilegal y que pone en evidencia una vez más el desinterés del rectorado de la
Universidad de Buenos Aires (UBA) en respetar la normativa vigente, que protege al Parque de Agronomía de toda intervención que altere su fisonomía en forma traumática. Esta actitud por parte de las más altas autoridades de la universidad -recordó- viene repitiéndose sistemáticamente desde los comienzos de la gestión de Oscar Schuberoff y lamentablemente vemos que continúa con el nuevo rector".
Cabe señalar que el predio de Agronomía fue categorizado en el año 1977 como parque público y ya en el año 2000 el proyecto del Plan Urbano Ambiental de la Ciudad de Buenos Aires confirmó dicha categorización, entendiendo que no es incompatible su carácter de parque público con el destino de área académica de las carreras de Agronomía y Ciencias Veterinarias, tal como lo avalan 100 años de pacífica convivencia.
El problema actual proviene de la incompatibilidad de radicar allí otras carreras universitarias con currículas mucho más numerosas, como es el caso de ciencias económicas, que por la cantidad de alumnos cursantes hace imposible la preservación de este espacio verde, que fue público mucho antes de que la universidad se instalara allí.
Sin ir más lejos, la Legislatura porteña aprobó en octubre de 2001 un proyecto de declaración de autoría de la legisladora de la Ciudad (MC) y actual diputada nacional, Juliana Marino, por la que solicitó al Poder Ejecutivo que hiciera cumplir a las autoridades de la Universidad de Buenos Aires con las normas de edificación que impone el Código de Edificación.
Al respecto, Suppa manifestó que "la UBA no puede ignorar el hecho de que los terrenos que ocupa fueron cedidos gratuitamente por la Nación para el uso de las carreras de Agronomía y Veterinaria exclusivamente y que cualquier otro proyecto que pretenda encarar en esas tierras debe fundamentalmente respetar el uso público de un parque que, debido a sus características, es único por su valor arquitectónico e histórico y debe ser preservado para el goce futuro de varias generaciones de porteños".
