A pesar de sus 33 años, José Campagnoli es un viejo operador político de Martín Sabbatella, a quien conoce desde la militancia en el colegio secundario. Junto al moronense, participó del experimento del Frente Grande y, más tarde, desde la intendencia de Morón se puso al frente de la Oficina Anticorrupción. En las últimas elecciones fue el jefe de campaña de Sabbatella, en unos comicios que depositaron al ex intendente en una banca de diputado nacional. Y, recientemente, acaba de transformarse en el referente del ?sabbatellismo porteño?, tal como lo llaman los armadores de ese espacio. Es decir, Campagnoli oficia como el flamante presidente del Encuentro por la Democracia y la Equidad (EDE), en la Capital.
Vive en Caballito y se está por mudar a San Telmo. Es hincha de Boca y tiene un hobby: cocinar para los amigos, ya que es soltero. Empezó a estudiar Ciencia Política hace dos años, en la UBA, ?porque cuando tenía la edad para empezar la facultad, con Martín tuvimos que ponernos a armar el Frente Grande?, cuenta. Con Martín ?todos los llaman así en la fuerza que lidera? fueron al mismo colegio, aunque con algunos años de diferencia. Sabbatella hoy tiene 39 años.
?¿Serán aliados del kirchnerismo en la Capital? Le adelanto desde ya que los K no son muy queridos por estas pampas, aunque seguro que ya lo sabe.
?Nosotros queremos unificar a la familia de centroizquierda en la Capital, para enfrentar el proyecto autoritario de Macri. Pero no queremos ser un monumento a la oposición; no buscamos decir sólo ?no?, sino que llegamos aquí para construir un progresismo de gestión y una gobernabilidad alternativa. En Morón hemos demostrado que se puede gobernar de otra manera, enfrentando a los aparatos, al statu quo, a la burocracia sindical, al clientelismo y a aquellos sectores que habían cooptado porciones del Estado y lo habían hecho propio. Tenemos la esperanza de reproducir ese esquema en la Capital.
?Insisto: ¿piensan hacerlo con el kirchnerismo?
?Sí, con aquellos kirchneristas que piensen que el Gobierno ha encarnado una fuerza innovadora, a partir de 2003, impulsando transformaciones que nosotros apoyamos y otras con las que no estamos de acuerdo. Y también con Proyecto Sur. Imaginamos la unificación de estas fuerzas. Pero también estamos pensando bajar a Capital en etapas. Por ahora, estamos hablando con algunos legisladores.
?¿Y en qué cosas no están de acuerdo con el kirchnerismo?
?Por ejemplo, en la manipulación de los datos del Indec y en haberse recostado sobre el aparato del PJ, que es un aparato degradado y corrompido que sólo busca su propia perpetuación. Ahí hubo una ruptura de la confianza. Creemos que ése ha sido un gran error del oficialismo.
?¿Y qué hace a Macri un autoritario, tal como usted lo define?
?El nombramiento del Fino Palacios no es precisamente un canto a la democracia.
?Le voy a decir que la permanencia de Guillermo Moreno tampoco. Sin embargo, sigue sentado en su puesto, a pesar de que el Gobierno fue derrotado en las urnas. ¿Por qué no le piden su renuncia o la de De Vido, que aparece en todas las sospechas vinculadas con la corrupción K?
?Bueno, mirá, nosotros denunciamos el caso Skanska. Y entendemos que nuestro rol como aliados de centroizquierda es aportar calidad institucional y transparencia, apoyar lo que creemos que está bien y cuestionar lo que está mal. Un ejemplo es el proyecto de ley de medios, que nosotros apoyamos, pero hacia el que teníamos dos cuestionamientos fundamentales: nos preocupaba cómo quedaba la composición de la autoridad de aplicación y la participación de las telefónicas, dos puntos que fueron tenidos en cuenta por el kirchnerismo, y modificados. Es una ley fundamental para democratizar la comunicación en la Argentina.
Con respecto a la derrota en las urnas, quiero decirte algo: fue producto del error que te señalaba antes, haberse recostado en el PJ, cuyos intendentes son funcionales sólo al que va a ganar. Son esos mismos intendentes quienes votaron a De Narváez porque les resultaba más funcional que Kirchner para perpetuarse.
?¿Realmente cree que a este Gobierno le interesa la libertad de expresión? ¿No le parece que, si pudiera, haría un monopolio mediático hiper-K con todo placer?
?Nosotros no confiamos en las intenciones del oficialismo. Confiamos en el texto de una ley que, una vez que salga, aunque el oficialismo quiera, no podrá violar. Deberá atenerse a esa letra. Los monopolios son siempre malos y ésta es una normativa que garantiza muchas voces, es mil veces superior a la ley de la dictadura que tardamos 26 años en cambiar. Y, sabemos, que cuando hay pluralidad, el autoritarismo no prospera.
?No me contó todavía qué lo hace autoritario a Macri, además de haber querido nombrar a Palacios.
?Los matones que tiene en la UCEP (NdR: se refiere a la Unidad de Control de Espacio Público); ésa es una fuerza de choque, producto de una concepción autoritaria del espacio público: echar a patadas a quienes han sido marginados por el modelo neoliberal. Más allá del discurso, Macri se siente cómodo en la derecha, y su agenda lo es. A medida que camina, se nota más.
?¿Ustedes quieren ocupar el lugar que dejó vacante Ibarra?
?Sí, ¿por qué no? Nosotros, en su momento, teníamos muchas coincidencias con Ibarra. Él proponía un progresismo moderno, pero fracasó.
?¿Y por qué tendrían éxito ustedes?
?Porque tenemos la experiencia de Morón en la que logramos construir una gobernabilidad alternativa, haciendo todas aquellas cosas que, quienes buscan mantener el statu quo, dicen que no se pueden lograr cuando se llega al gobierno. Queremos construir un progresismo que sea eficaz y con una ética franciscana, tal como lo ejercimos en Morón. Entonces, si lo pudimos hacer en un municipio que tiene más habitantes que Santa Cruz o San Luis, ¿por qué no lo haríamos en la Capital?
?Quizá porque la Capital tiene una lógica impredecible y está muy fragmentada. El propio kirchnerismo fue dividido.
?Bueno, eso no puede suceder más. Te voy a decir algo: la Capital no se hizo de derecha cuando votó a Macri. Simplemente se desilusionó de un progresismo que no supo gestionar, de ahí que nuestro desafío es proponer algo mejor. En eso, también, se basa nuestra esperanza. Pero, por ahora, estamos en el primer escalón de desembargo que planeamos en tres etapas.
(NOTA PUBLICADA ORIGINALMENTE EN EL SEMANARIO NOTICIAS URBANAS Nº 207, DEL 24/09/09).