El presidente del Bloque Encuentro Popular para la Victoria, Juan Cabandié, presentó un proyecto que propone que los kioscos y bufetes que funcionan dentro de las escuelas porteñas vendan alimentos saludables, con el propósito de desalentar la ingesta por parte de los alumnos de la denominada "comida chatarra?, que favorece a la obesidad infantil y al sobrepeso.
La iniciativa plantea la creación del programa "Alimentación Saludable en Instituciones educativas" y contempla también la estimulación de la actividad física entre los estudiantes, a través de la fijación de la carga horaria de las clases de gimnasia y el fomento de la actividad fuera de la escuela.
?Es de suma importancia educar a los niños desde temprana edad para un buen comer entendido como hábito que debe ser adquirido a fin de lograr un normal crecimiento y desarrollo?, explica entre sus fundamentos la iniciativa en sintonía con la ley nacional que puso en marcha el Programa de Prevención y Control de los trastornos alimentarios.
Por ello, la propuesta porteña plantea ampliar la oferta de productos saludables dentro de las escuelas y limitar la comercialización de aquellos alimentos que, según los especialistas en nutrición, resultan perjudiciales como las golosinas con alto valor calórico y grasas.
Asimismo, fija la adherencia a la norma por parte de los servicios de comedores escolares que se brindan en instituciones educativas de gestión estatal, mientras que a los pertenecientes a establecimientos privados solicita la adecuación de los menús a los estándares promovidos.
La propuesta, también multa a aquellos responsables de los kioscos o bufetes que vendan alimentos o bebidas que no se ajusten a la categoría de "saludable?. Según consigna el texto, en una evaluación realizada por profesionales del Hospital Durand a 2.202 alumnos de escuelas públicas de la Ciudad, entre febrero y agosto del 2006, tres de cada diez chicos de 6 a 13 años, es decir, el 28,9 por ciento del total padecían de sobrepeso u obesidad.
