"No está capacitado para ejercer el cargo", "le pedí frontalmente que renuncie", "no está a la altura de las circunstancias", son algunas de las frases que expresaron el año pasado varios legisladores luego del paso por la Legislatura porteña del, por entonces, director general de Salud Mental de la Ciudad, Gregorio Alcaín.
Desde su asunción, en julio de 2009, se criticó su persona y su profesionalismo por su estrecha vinculación con el ex director del Moyano Néstor Marchant, cuya gestión finalizó con una intervención del neuropsiquiátrico por irregularidades.
Cuando asumió, apadrinado por Jorge Lemus, el Ministerio de Salud implementó algunos cambios en el área de Salud Mental, como la modificación de los directorios del Moyano, del Centro de Salud Ameghino y del Tobar García, para que Alcaín lleve adelante sus políticas, pero nada mejoró.
Las críticas continuaron constantemente y, este año, la situación del neuropsiquiátrico infanto juvenil Carolina Tobar García, donde las obras se deberían haber finalizado en 2007, dejó en claro la severa crisis que sufre el área.
Ante esta situación, el Gobierno de la Ciudad decidió dar por finalizada la gestión de Gregorio Alcaín. El reemplazante es Juan Alberto Garralda, quien ejercía hasta ahora la dirección del hospital ?José T. Borda?.
En la práctica, Garralda está al mando de las políticas en salud mental desde el 22 de junio de 2010, aunque la noticia se publicó en el boletín oficial recién este jueves, mediante el decreto Nº 548/10.
