Jorge Telerman anunció este último sábado que las fechas de las elecciones para jefe de Gobierno porteño, en las cuales también competirá, serán el próximo 3 de junio. El adelanto de los comicios -se lo esperaba, pero para más adelante- levantó más críticas que defensas, entre otras cosas porque obliga a apurar definiciones.
Previsiblemente, una de las defensoras de la medida fue la ministra de Derechos Humanos del gobierno de la Ciudad, Gabriela Cerruti.
En declaraciones radiales, la funcionaria dijo hoy que la iniciativa es parte de un proceso "beneficioso para todos" y que es hora de "tomarse las cosas con menos dramatismo".
La decisión anunciada por Telerman, que según trascendió ya era conocida por el Presidente de la Nación, y por Raúl Alfonsín, Elisa Carrió, el ministro Julio de Vido y el secretario de Legal y Técnica de la Nación, Carlos Zannini, entre otros, se esperaba fuera anunciada el 1 de marzo, cuando el alcalde inaugure en la Legislatura porteña el ciclo anual de sesiones ordinarias.
El más perjudicado por el anuncio es, claramente, el candidato oficialista, Daniel Filmus, que no sólo no levanta en los sondeos sino que además sigue sin ser reconocido por el gran electorado.
Al respecto, Cerruti dijo que (Filmus) aún "no ha logrado instalarse" en la ciudadanía, y que su postulación es "débil y tambalea".
"Creo que no ha logrado instalarse todavía, veremos qué pasa de aquí en adelante, ahora que fijaron la fecha de elecciones", finalizó la ministra, haciéndose involuntariamente eco de varios kirchneristas que piensan que ahora tendrán que trabajar el doble para hacer del sociólogo alguien de impacto inmediato.
