La batalla interna del PRO

La batalla interna del PRO

En breve, Macri tiene que definir si la elección legislativa de 2009 va a ser unificada o no con la nacional. El problema es que esa fuerza política tiene sólo un candidato potable, Gabriela Michetti, quien aspira a que los comicios sean desdoblados. La eterna disputa de la vicejefa con Horacio Rodríguez Larreta. Las diferentes posturas en la "pata peronista" y el acuerdo Solá - De Narváez como telón de fondo.


Ya comenzó 2009 y el jefe de Gobierno, y de PRO, Mauricio Macri, debería anunciar muy pronto si desdobla o unifica las elecciones legislativas. El tema, para Macri, no es menor, ya que significa tomar la decisión de expandir su fuerza a nivel nacional, de cara a las presidenciales de 2011 o en cambio, asegurarse la gobernabilidad de la Ciudad, que con la conformación actual de la Legislatura no la tiene fácil. Si desdobla y pone fecha para los comicios, a fines de junio, limita la discusión a los temas locales y evita enredarse en el enjambre nacional. Su fuerza política es todavía muy chica y su figura aún no traspasó los límites de la Avenida General Paz y el Riachuelo.

Esta discusión, puertas adentro de PRO, tampoco es menor: la tropa está dividida en tantas opiniones como líneas internas tiene. Y más, dentro de esas mismas bandas hay diferencias por ahora insalvables, como está sucediendo en la "pata peronista", en la que un sector juega con la vicejefa de Gobierno, Gabriela Michetti, y el otro con el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta.

Pero vamos por partes.

El michettismo quiere que las elecciones se desdoblen para asegurarse la continuidad dentro del gobierno y usarla como plataforma con vistas a las elecciones de 2011, en las que Michetti aspira a quedarse con el lugar de Macri, si es que finalmente el ex presidente de Boca Juniors decide jugar electoralmente a nivel nacional y no reelegir.

Sotto vocce, el michettismo también busca vengarse del Rodríguez Larreta versión 2007, que dejó a sus enemigos íntimos afuera del armado electoral. Pero como en esta vida todo va y vuelve, por aquello de las deudas kármicas, ahora el gobierno macrista tiene que lidiar con la inoperancia de varios miembros del PRO en la Legislatura. En aquel momento, el larretismo no lo pensó: con tal de no dejarle pasar candidatos a Michetti, prefirió incorporar aspirantes sin experiencia o con escasa o nula trayectoria o militancia política. De esta manera, hoy la responsabilidad de la discusión con la oposición, donde se destacan varios pesos pesados, termina recayendo sobre la experiencia de la "pata peronista", ya que guste o no, el PJ sigue siendo una escuela de formación política y de militancia, aún con todas sus contradicciones.

Michetti, consciente de que PRO no tiene otra carta que ella para jugar este año, pide no sólo que las elecciones se desdoblen sino que le dejen el armado de la lista de legisladores a su cargo.

Rodríguez Larreta quiere todo lo contrario. Su ideal es unificar la elección en octubre y jugarla a Michetti como diputada nacional. Para sacarla, de paso, del ajedrez político de la Ciudad.

En medio de esa disputa también tiene aspiraciones la "pata peronista".

"Si bien todavía estamos en la misma situación de fines del 2008, es decir, sin definiciones electorales, sin saber si los comicios serán unificados o desdoblados, a la postura nuestra la acompañan varios peronistas del bloque legislativo Propuesta Peronista", aseguró a este medio un "michetto" paladar negro, el diputado y dirigente del partido Federal Martín Borrelli.

Borrelli precisó que juegan sus fichas a Michetti, el actual auditor porteño Santiago de Estrada y los legisladores Silvia Majdalani, Álvaro González y Diego Santilli. Pero no acompañan Cristian Ritondo ni Daniel Amoroso.

El bloque PRO pone en juego las bancas de Carlos Araujo y de Marta Varela, de Recrear; Santilli, Amoroso y Silvia Majdalani (Propuesta Peronista); Luciana Blasco, Fernando de Andreis, Roberto Destéfano, Lidia Saya y Marcelo Godoy (Compromiso para el Cambio) y Oscar Zago, que representa al radicalismo M: son 11 escaños. Y debería ganar 16 para tener quórum y conseguir aprobar leyes que requierar mayorías de 31 votos. Ahora cuentan con 26 legisladores.
Borrelli dice que "en una elección razonable, deberíamos obtener, por lo menos, 13 legisladores".

Ritondo, consultado por NU, defendió su postura de unificar las elecciones. ?Primero, porque si Macri desdobla. tendrá por seis meses, como mínimo, la gestión paralizada. En ese escenario, las elecciones se tendrían que hacer antes que las generales, convocadas para octubre", dijo.

Pero "con las elecciones unificadas ponemos a prueba una sola vez la gestión. Además, no tenemos un buen candidato para diputado nacional. La única aspirante seria se llama Gabriela Michetti. Si tenemos un solo candidato para asegurarnos el triunfo, tenemos que ir a elecciones unificadas. Si tuviéramos más de un candidato, otra sería la discusión", señaló el legislador.

Esta idea es la que comparte el asesor ecuatoriano Jaime Durán Barba, quien argumenta que si PRO no tiene un buen candidato para jugar la nacional, que no se presente a competir.

"¿Por qué querría Macri gastar 25 millones de pesos, que es lo que costaría a la Ciudad una elección desdoblada? Si unificamos, los gastos de los comicios correrían por cuenta de Nación", se preguntó y respondió Ritondo.

Este semanario interrogó al diputado acerca de si atrás de esa obstinación no se escondería su ambición de quedar como vicepresidente primero de la Legislatura, que es el cargo que ocupa hoy Santilli y que va a dejar este año. Ocurre que si se postula Michetti por la Ciudad, ella quedaría al comando de la Legislatura.

"Para ser honesto, si la elección es unificada, tengo posibilidades de hacerme cargo de la vicepresidencia de la Legislatura", reconoció, sin dudar, Ritondo.
Santilli, en un reportaje que concedió a NU a fines de diciembre, expresó su posición.

NU: -¿Cómo cree que tienen que ser las elecciones legislativas del año que viene? ¿Desdobladas o unificadas?
DS: -Yo hablo desde lo personal, mi impresión es que hay que fortalecer la autonomía, debatir los temas de la Ciudad. No creo que si las elecciones se unifican puedan debatise las cuestiones de la Ciudad, se van a debatir los temas nacionales.

En off, los peronistas PRO admiten que la discusión pasa por jugar con la alianza Francisco de Narváez-Felipe Solá, la posición de Ritondo y Amoroso, o seguir a Mauricio Macri y esperar a que éste defina si se integra a esa alianza o no. El escollo, al parecer, es la mayor o menor cercanía al caudillo de Lomas de Zamora.

(PUBLICADO ORIGINALMENTE EN EL SEMANARIO NOTICIAS URBANAS Nº 172, DEL 22/01/09).

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