Chiche Pecorino, Juan Carlos Cena, Rafael Cullen, Jorge Vázquez y Tate Martínez se reúnen en un taller de mantenimiento de ascensores. Lo hacen todos los jueves a la tarde. Discuten sobre cómo contar su historia. Y eligen a un testigo privilegiado: el director de cine Alejandro Fernández Mouján, a quien le proponen, justamente, ficcionalizar su historia, que es la de la resistencia peronista que protagonizó, entre 1955 y 1965, la clase obrera argentina.
Dice Fernández Mouján: ?Ellos querían contar, a través de una ficción, la resistencia de las cocinas, o sea, la resistencia que se planificaba en las cocinas de las casas, porque no tenían estructura política como en los 70. En las cocinas se planificaban las primeras acciones. Así que ésa era la metáfora que les rondaba?. Y así nació el documental Los resistentes.
Se trata de más de tres horas que pasan en limpio la experiencia de la memoria: un debate a grito pelado, una charla íntima, un monólogo que termina en lágrimas o el susurro de un viejo que no quiere que algún nombre se pierda en el olvido. Así, todos los domingos de enero y febrero, a las 6 de la tarde, el cine del Malba (Av. Figueroa Alcorta 3415) proyecta este documental (y lo hace a sala llena). Hablamos con el director, Fernández Mouján, acerca de la película y del peronismo. Y de esas historias que se clavan en el corazón del peronismo.
?¿Qué cree que viene a decir hoy del peronismo este documental?
?Hay algo que es común, y es que varios de los resistentes y yo tenemos un mismo pasado de militancia, en una organización que fue el Peronismo de Base. En ese sentido, la película se mantiene bastante fiel a lo que fue la propuesta o la intención del Peronismo de Base, que fue generar una discusión real al interior del peronismo, y trabajar por un peronismo mucho más identificado con la historia de la clase obrera peronista, que del peronismo como movimiento policlasista, donde era posible la armonía de clases y todo lo que sintetizó La comunidad organizada, de Perón. Creo que la película rescata el peronismo de abajo, de los que nunca formaron parte de la estructura clásica del PJ o de la estructura sindical más arraigada en lo que fue o sigue siendo la CGT. De alguna manera, el peronismo que rescatamos estuvo más ligado a lo que fue la CGT de los Argentinos, a los programa de Huerta Grande, de La Falda. Y creo que este grupo de ?resistentes? rescata esa historia. Aunque no quiere decir que todos los que testimonian piensan lo mismo. Pero son los que siempre dijeron que no, los que mantuvieron una postura de rebeldía frente a las transas. Siguen siendo trabajadores, hoy tal vez jubilados, pero siguen manteniendo una conducta de vida. La idea fue entrevistar a los que se mantuvieron en esa conducta. Hay un caso emblemático, que es Armando Cavalieri, que estuvo en los comandos de resistencia pero hoy es un burócrata enriquecido, es más un empresario que un sindicalista. Dijimos que esa gente no. Hay discusiones que están en el filme que siguen siendo parte del peronismo, como la discusión sobre el rol de Perón, lo que hizo en su momento, por qué se fue, a quiénes nombró, y la discusión del último Perón, sobre López Rega, la Triple A? Se trata de la discusión sobre qué es el peronismo sin negar que haya otros peronismos. Dentro del peronismo como gran movimiento policlasista entra tanto Menem como estos resistentes, que son lo opuesto.
?¿Cómo fue tu relación con el peronismo, como cineasta y como militante?
?Formé parte en los 70 del Peronismo de Base, a pesar de que al principio de la militancia, en el 70, vi La hora de los hornos en forma clandestina, en una casa peronista, y me dije ?yo quiero hacer esto?. En realidad, en su momento, un grupo de compañeros, todos de 17 o 18 años, decidimos incorporarnos a la lucha política, y si bien algunos de nosotros teníamos inclinaciones artísticas, las dejamos de lado. Recién me pude dedicar al cine en los 80. Mi relación como cineasta con el peronismo fue a través de Pulqui (NdR: "Pulqui, un instante en la patria de la felicidad", su anterior documental), "Los resistentes" y un corto que hice sobre Evita para Canal 7. Pienso que las películas aportan algo a la visión del peronismo que te marcaba antes, por la reacción de la gente. Mi intención no era meterme en la discusión interna del peronismo, sino dirigir la película fundamentalmente a los jóvenes, como fueron estos resistentes, para que vean que otra forma de hacer política es posible.
?¿Y a quién puede incomodar dentro del peronismo Los resistentes?
?Bueno, a quien se sienta incomodado. A los que pretenden tener una imagen anquilosada, de comunidad organizada, de capitalismo humanizado, de integración de clases, y que niegan la dinámica conflictiva que tiene el peronismo. Y a los sectores que dentro del peronismo no quieren que les sea recortada la porción de poder que manejan. Estos viejos vienen a decir que hay otro peronismo, que el peronismo no es el PJ. El PJ es una estructura que quedó en el tiempo y que ha dado monstruos como Eduardo Duhalde, y demás figuras nefastas. O Ruckauf.
?¿Y creés que es peronista el proyecto kirchnerista?
?Como dijo Perón: peronistas somos todos. Ahora, si separamos la paja del trigo, podemos ubicarlo dentro del peronismo que tiene que ver con la estructura del PJ, de la que hasta ahora no se ha separado o al menos nunca han dicho algo al respecto; al contrario, plantean la lucha por el aparato, incluso ni siquiera se han tomado la libertad de sacar los pies del plato para reconocer otro sindicalismo que no sea el de la CGT oficial. Algo que podría haber hecho. Si lo comparamos con el pejotismo derechista de Duhalde, creo que no son lo mismo. Tampoco respecto al de Menem. Pero contradictoriamente tienen a Scioli (y a otros). Y con respecto al peronismo de la película, tienen poco: algunas cuestiones discursivas, gestos de rebeldía coyunturales. Y algo para destacar es que desde el Ejecutivo no se manda reprimir a los trabajadores.
?¿Qué sentís frente a los que plantean que Macri podría liderar el peronismo?
?Tal vez lo mismo que cuando Isabel y López Rega lideraron el peronismo, volveremos a estar en la vereda de enfrente de ese peronismo. Con Macri no es una cuestión de peronismo, es de clase.
Fernández Mouján sigue, repasa la película. Se trata, en definitiva, de un ejercicio de justicia: conocer una parte de la historia del pueblo argentino que no está en los libros. Vayan y vean.