Bielsa y López de Castro versus D’ipólito

Bielsa y López de Castro versus D’ipólito

Los porteños que poseen autos cuyo valor excede los 15.000 pesos sufrirán un importante aumento en el impuesto a las patentes que recauda el Gobierno de la Ciudad. El subsecretario de Ingresos Públicos porteño, José Luis D'ipólito, aseguró que se mantiene la misma alícuota de años anteriores, que el aumento se debe a la nueva valuación fiscal de los vehículos producto de la devaluación,y que este aumento sólo alcanza a 200.000 coches. Por su parte el candidato a jefe de Gobierno Rafael Bielsa y la diputada porteña Irene López de Castro coincidieron en que esta suba impositiva no se condice con la realidad salarial de los porteños. Bielsa definió al aumento como "una imbecilidad"


A medida que fueron llegando las boletas de la primera cuota del impuesto a las patentes para 2003 del Gobierno de la Ciudad comenzaron a surgir los reclamos contra el importante aumento que se ha producido en este gravamen. El incremento afecta a los aproximadamente 200.000 vehículos cuyo valor supera los 15.000 pesos.

Ante la gran cantidad de cuestionamientos que surgieron a raíz de lo que se ha denominado popularmente "el patentazo", el subsecretario de Ingresos Públicos del Gobierno porteño, José Luis D’ipólito, explicó que "el parque automotor de la Ciudad tiene un millón de vehículos. De ese millón de vehículos, hay 400 mil que tienen una antigüedad superior a los 12 años, por lo que están exentos del impuestos, o sea que nos quedan 600 mil vehículos que son los que tienen que pagar la alícuota".

"De esos vehículos, apróximadamente son 200.000 los que van a sufrir un aumento promedio del 35 por ciento, porque la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires ha votado un descuento en este impuesto especialmente para aquellos autos que tengan una valuación fiscal menor a los 15 mil pesos al 31 de octubre del 2002. Ese descuento es equivalente al incremento que pudiera haber entre la patente abonada en el año 2002 y la patente que va a abonar en el año 2003. Este beneficio también se incorporó al servicio público de transporte urbano de pasajeros, a los taxis y a los remises. Y la única condición de esto es que se hallen al día con los impuestos de la Ciudad".

D’ipólito aclaró que "el porcentaje que se abona de patente siempre fue del 3,52 por ciento de la valuación fiscal. Ése es el impuesto anual que se divide en 6 cuotas o con un pago anual con un descuento del 10 por ciento". El funcionario añadió que "del parque automotor tenemos 800 mil vehículos que, en teoría, algunos no pagan y otros no van a recibir aumento. Solamente las personas de mayor poder adquisitivo son alcanzadas por esta medida"

Por último el subsecretario sostuvo que "el Ejecutivo lo que hace es cumplir las leyes que vota la Legislatura". Cabe mencionar que si bien todo lo que se refiere al Presupuesto y al Código Fiscal de la Ciudad fue aprobado por el Cuerpo, la propuesta fue del Gobierno porteño.

"UNA IMBECILIDAD"

A propósito de este aumento de las patentes el candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad por GESTA, Rafael Bielsa, aseguró: "El patentazo no me sorprendió porque había estudiado el presupuesto a fin del año pasado. Parece que en el marco de un presupuesto electoral, es muy difícil esperar una distribución de ingresos racional. Lo peor de este impuesto es su imbecilidad porque sobre un presupuesto de 3.612 millones de pesos, este incremento implica 30 millones de pesos. O sea que desde el punto de vista de la globalidad del presupuesto, esto lo único que hace es irritar a la gente por un ingreso mínimo".

"Lo que no se menciona -agregó- es que la Ciudad hace cinco años que no percibe impuestos de sellos, con lo cual perdió 260 millones de pesos, y que hay aproximadamente 10.000 contribuyentes en condición de morosos por incumplimiento de los planes de pagos de ingresos brutos. Morosidad que representa 218 millones de pesos, cuyo cobro no se persigue. Por otra parte hay una cantidad muy importante de dinero de cableado por aire y subsuelo que hace cuatro años que no se paga a la Ciudad y que la dirección de Rentas dice que tiene a todo el mundo intimado, cuyo pago tampoco percibe".

El ex síndico de la Nación señaló además que "independientemente de que sea justo o injusto el aumento, acá ha habido una devaluación, ha habido una revalorización en términos de pesos argentinos, por lo que esto es contrario a cualquier idea de política tributaria. Cuando se mortifica a la gente, la fatiga, la pone contra el fisco, esto solamente se justifica en situaciones excepcionales contra recaudaciones excepcionales, no por 30 millones de pesos".

Por su parte la diputada porteña, Irene López de Castro (Bases y Puntos de Partida), señaló que "sobre fin de año los medios creyeron en lo que decía el Gobierno de que iba a ser un aumento promedio del 35 por ciento. Yo tuve debates muy fuertes con el propio secretario de Hacienda y el subsecretario de Ingresos Públicos por este tema. Presenté un proyecto de ley para que no fuera modificada la base imponible para este ejercicio fiscal y bueno, lamentablemente no fuimos escuchados".

Para López de Castro "éste es un aumento muy importante porque en la base imponible se estima, en el mes de octubre, el valor del automóvil tomando los valores que determinan las cámaras aseguradoras, las cámaras que comercializan los vehículos, las cámaras automotrices y demás del sector. De ahí se obtiene el valor, se hace una quita del 5 por ciento de amortización del año en curso y ése es el valor que se toma para la base imponible".

"La base imponible por el cual se pagó 3,52 por ciento de alícuota correspondía a la valuación del 2001. Cualquier vehículo en el 2001 costaba entre 10.000, 15.000, 20.000 0 35.000 dólares o pesos. Ese mismo vehículo hoy, producto de la devaluación o la pesificación, obviamente vale más. Por lo tanto la gente va a tener in incremento importantísimo en la patente", señaló la diputada.

"Creo que es un abuso, que no se justifica y no se tiene noción de la situación del asalariado que sigue cobrando lo mismo y que cada vez su salario le rinde menos. Esto es absolutamente injustificado, porque el Gobierno, si administrara bien los recursos, no necesitaría hacer este aumento de patentes escandaloso. Por otra parte la Ciudad de Buenos Aires está destruida. Basta preguntarle a cualquier taxista la cantidad de veces en el año que llevó su auto a hacerle el tren delantero. Le advertí al propio secretario de Hacienda que lo único que iba a lograr con esto es no recaudar lo que sí hubiera recaudado dejando la patente al mismo valor del año anterior. Como sí ha hecho, por ejemplo, la Provincia de Buenos Aires", concluyó López de Castro.

Te puede interesar

Qué se dice del tema...