La devaluación de la moneda local suele convertirse en una ventaja en términos de compras y turismo para los países con los que se compartan frontera, principalmente.
En este caso, la devaluación del peso argentino hace al país más accesible para países como Brasil, Uruguay, Paraguay y Chile. Es por eso que desde este lunes los uruguayos que crucen a la Argentina no podrán regresar a su país con más de 5 kilos de alimentos sólidos.
Las autoridades de la Dirección Nacional de Aduanas uruguaya justificaron la medida al explicar que solo se permitirán “que pasen con una canasta familiar razonable y no con artículos que no sean para alimentación”, lo cual cuidaría su industria nacional, haciendo que los uruguayos le compren a los mismos uruguayos.
Esto sucede porque es usual la práctica de cruzar los pasos fronterizos como los de Río Negro, Paysandú y Salto, para realizar compras más económicas gracias al tipo de cambio.
Según publicó el diario uruguayo El País, el mayor flujo de mercaderías en estos días se registró a través del puente que une Colón (Entre Ríos), con Paysandú. Cabe destacar que las restricciones ya existían, pero ahora se controlarán con mayor intensidad.