Por medio del decreto número 138/02 el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, dió por terminada la novela de los automóviles oficiales, desafectando los autos oficiales del uso de los funcionarios por dehbajo de los secretarios. Además de declarar su innecesariedad, el decreto aclara que no se podrán utilizar otro tipo de vehículos oficiales en reemplazo de los desafectados, como por ejemplo, las camionetas de las distintas reparticiones, que algunos suelen llevarse a sus casax. Los choferes serán reubicados en otras dependencias.
En el decreto se invita a que sigan el mismo camino, los automóviles del Ente Regulador de Servicios Públicos, el Banco de la Ciudad de Buenos Aires, y a otros entes descentralizados de la ciudad, así como a los Poderes Legislativo y Judicial de la Ciudad Autónoma.
La medidad alcanza también a los representantes de la ciudad en la Corporación del Mercado Central, en Autopistas Urbanas S.A., en la Corporación Antiguo Puerto Madero, en la Corporación Buenos Aires Sur S.E., en la Coordinación Ecológica Area Metropolitana S.E. (CEAMSE), en la Obra Social de la Ciudad de Buenos Aires (OSBA), en el Consejo de la Magistratura y en el Tribunal Superior de Justicia.
Paralelamente se crea el Registro Unico del Parque Automotor de la CBA en el ámbito de la Dirección de Material Rodante, en el cuál se indicará su nueva afectación o si se lo ha declarado innecesario.La implementación de esta operatoria fue asignada a la Subsecretaría de Logística y Emergencia que conduce Elizabeth Lía María, quién esta tarde realizará una reunión en la cuál se analizarán metodologías y plazos para cumplir con la norma que arrojarán precisiones sobre cuál será el ahorro de la ciudad con esta medida
Lo que trascendió es que queda prohibido a partir de la presente, la adquisición de vehículos para uso protocolar de funcionarios y se delega en dicha subsecretaría el ejercicio de las competencias para la compra y alquiler de vehículos, destinados exclusivamente para fines operativos.