"Los trabajadores afiliados a las obras sociales se encuentran en un estado total de indefensión debido a la decisión del Poder Ejecutivo de eliminar los controles respecto de las prestaciones de salud", denunció hoy el diputado socialista en el ARI, Héctor Polino.
La situación irregular fue puesta al descubierto el pasado 15 de octubre, luego de que la superintendencia de Servicios de Salud -que dirige Rubén Cano- eliminara la Sindicatura Externa y despidiera a 110 trabajadores de esta dependencia. Esta repartición era la encargada de controlar el destino que las obras sociales dan a los fondos que aportan los trabajadores.
Polino afirmó que "frente a incumplimientos en la prestación médica obligatoria, el damnificado quedará indefenso porque el Estado ya no cuenta con el personal encargado de ejercer dicho control".
En un comunicado difundido hoy, el diputado por la Ciudad de Buenos Aires responsabilizó a Rubén Cano por dejar actuar a las obras sociales sin control. Y recordó que "Cano fue denunciado semanas atrás ante la Oficina Anticorrupción por el cobro de coimas por facilitar el desvío de fondos a favor de las mismas obras sociales a las que ahora libera de todo control".