El fin de semana, las declaraciones cruzadas entre funcionarios nacionales y de la Ciudad pusieron el tema de la seguridad porteña en lo más alto de la agenda. Pero luego de las chicanas entre un lado y otro, finalmente todo sigue igual con relación a la prestación de los servicios adicionales de la Policía Federal en diferentes dependencias porteñas.
Es que a última hora del lunes se reunió el jefe de Gabinete de la Nación, Aníbal Fernández, con el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta y el ministro de Seguridad, Guillermo Montenegro, quienes se comprometieron a saldar la deuda de 40 millones de pesos a través de un cronograma de pagos.
"Este tipo de discusiones nos ayudan a rediseñar la ciudad. Lo que es espacio público se debe cubrir por el servicio de la Policía Federal", aseguró este martes Montenegro, en declaraciones radiales. Y agregó. "Los conductores de la coordinación entre ambas fuerzas seremos (Julio) Alak y yo. La idea es que colabore con la Federal de acuerdo a un protocolo establecido. La Policía porteña se pondrá en marcha los primeros días de diciembre y serán 850 efectivos. Tendrá sus comisarías y la idea es respetar las comunas".
A raíz de la mencionada deuda, el pasado viernes la fuerza nacional advirtió sobre la posibilidad de retirar la seguridad adicional, hecho que se hizo visible el lunes. Desde el Gobierno analizaron la posibilidad de contratar seguridad privada, y el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, pidió una audiencia con el jefe de Gabinete nacional, Aníbal Fernández.