Finalmente, la presidenta Cristina Kirchner le encontró un lugar a su exjefe de Gabinete Juan Manuel Abal Medina. Será representante permanente ante el Mercosur, un cargo con rango de embajador que tiene como función actuar como enlace oficial del país ante el bloque regional.
El exfuncionario deberá mudarse a Montevideo, donde tiene sede de la secretaría general del bloque. Es un cargo que lo devuelve a su antigua función como asesor en temas regionales que ocupó cuando el expresidente Néstor Kirchner encabezó la secretaría general de la Unasur y lo sacó de la Casa Rosada para que lo acompañara.
La decisión de la Presidenta es nombrar la mayor cantidad posible de embajadores políticos ante los foros internaciones, según describieron en la Casa Rosada, como fue el caso de Nilda Garré ante la OEA o Marita Perceval ante la ONU, con la idea de apuntalar las posiciones argentinas en el exterior.
El exfuncionario debió abandonar la Jefatura de Gabinete tras la derrota electoral y el cambio que hizo Cristina Kirchner en noviembre pasado en su equipo de colaboradores. En su lugar nombró al gobernador chaqueño Jorge Capitanich como ministro coordinador.
El nombre de Abal Medina había surgido para varios cargos tras su salida de la Casa Rosada. Primero se especuló con su llegada a la embajada en Chile, y después como Defensor del Pueblo, cargo para el que no llegó ni siquiera a postularse oficialmente ante el rechazo de la oposición.