El sábado, durante un acto en Santa Fe, el mandatario provincial Maximiliano Pullaro y el presidente y senador de la UCR, Martín Lousteau, llamaron a no tener “miedo” a competir. Ambos encabezaron el primer plenario de organizaciones radicales. La idea de Lousteau es crear una alternativa a Javier Milei para las elecciones legislativas del 2025.
“No podemos tener miedo a competir”. Lo dijo Lousteau durante su discurso en el primer plenario de organizaciones radicales que se organizó en Santa Fe, territorio que gobierna su aliado Pullaro.
La idea es encarar una agenda territorial para recorrer el país y conseguir aliados para su estrategia electoral que incluye al peronismo no kirchnerista.
“No podemos tener miedo a perder por nuestras ideas y después no podemos tener miedo de gestionar defendiendo nuestras ideas, Maxi Pullaro y el radicalismo de Santa Fe son un ejemplo de todo eso”, resaltó Lousteau en su discurso.
En medio de fuertes críticas que lanzó a Milei por su política económica -a la que calificó como “ajuste abrupto y desigual”- Lousteau aprovechó enviar un mensaje a sus adversarios internos en la UCR, encabezados por Alfredo Cornejo y Gustavo Valdés. En principio, reconoció que existen “tensiones internas propias de la vida partidaria”, pero consideró que “no hay que sentirse mal por esa tensión”.
“Pero deberíamos cumplir los roles de gobernador, intendente y partido de manera coordinada”, reclamó.
Los gobernadores creen que las autoridades del Comité Nacional tienen una mirada porteñocentrista y que no comprenden las responsabilidades que implican la gestión de un territorio. Del otro lado, Lousteau entiende que con una estrategia colaboracionista con Javier Milei el partido centenario corre el mismo riesgo que hoy enfrenta el Pro, en cuanto a la representatividad, y de perder las chances de forjar competitividad para el 2027.
Desde que asumió la presidencia del Comité Nacional, el líder de Evolución supo que en enfrente tendría a los integrantes de Causa Federal -ex Grupo Malbec- como principales adversarios. Sin embargo, en sus conversaciones con correligionarios proponía que los gobernadores mantuvieran un vínculo cordial con la Casa Rosada para poder cumplir con los compromisos de gestión y que las autoridades partidarias flas encargadas de enfrentar discursivamente y parlamentariamente las medidas y políticas que creyeran erróneas. Con el único que pudo establecer esa dinámica fue con Pullaro.
Pullaro mostró una “profunda actitud de pertenencia partidaria” y que coincidió la mirada crítica a las políticas que impulsa Milei. En el entorno del gobernador santafesino aclaran que está 100% dedicado a la gestión de su provincia y, además, en mantener la armonía en la coalición local. Incluso buscan bajarle el tono a una posible postulación presidencial en el 2027.
“Como desafío creo que tenemos que ponernos a que nuestro partido pueda construir poder en Argentina y poder llevar adelante los cambios, los desafíos y las transformaciones que tiene que haber en nuestro país”, coincidió Pullaro con Lousteau sobre el futuro del partido.
Pero también aprovechó para enviar un mensaje a la interna radical: “Para eso el rol de la UCR es fundamental, el rol del partido. A veces muchos dicen que tenemos que armar una mesa de gobernadores porque ahí está el poder. Yo creo que el poder tiene que estar en el partido y el partido tiene que ser a quien convoque a los bloques parlamentarios y que podamos escucharnos y sintetizar posiciones”.
La agenda de Lousteau será “abierta y no partidaria”. En Evolución quieren dejar en claro que las puertas no están cerradas para sumar al peronismo en ese armado electoral que, como base fundacional, tiene como límites al kirchnerismo y a aquellos que apoyan una profundización del modelo libertario.
El encargado de llevar adelante esas conversaciones es Yacobitti. “Con todos aquellos que estén dispuestos a salir de la tutela de Cristina y Máximo Kirchner se puede conversar”, aseguraron a Infobae en Evolución quienes, además, confirmaron que ya hubo encuentros con Juan Manuel Olmos, Auditor General de la Nación y exfuncionario de Alberto Fernández. “Con Axel (Kicillof) también podemos hablar, si es que se termina de independizar de Cristina”, deslizaron casi como una propuesta pública.
