En el pasado Bafici, el reconocido bajista Charlie Haden recordaba con quienes había tocado y dijo que uno de sus mayores gustos fue haberlo hecho con Dino Saluzzi. No es la primera vez que otro músico de renombre destaca la categoría del bandoneonista argentino, que retornó a los escenarios porteños con una serie de shows en el Teatro de la Comedia.
El público que acudió al concierto tenía la particularidad de estar compuesto en su mayoría, por personas adultas, muchos turistas y algunos estudiantes de música.
Si bien estaba anunciado que la banda iba a tener un formato de trío (Dino en bandoneón, su hijo José María en guitarra y su sobrino Matías en bajo), Saluzzi presentó un quinteto que incluyó a Nicolás ?Colacho? Brizuela en guitarra y a Cuchara Saluzzi ?hermano de Dino? en saxo.
Lo primero que anunció el músico fue que esa noche iba a hacer que se ?junten las dos puntas de la música argentina, el tango y el folclore?. Lo que siguió fue un magistral concierto que tuvo de todo: tango, zambas y algún toque de jazz para el deleite de los concurrentes.
Saluzzi realizó homenajes a Osvaldo Pugliese y a Enrique Delfino con ?Recuerdo? y un arreglo excelente de un tango de Delfino para saxo y bandoneón. A continuación, llegó el gran momento musical y de emotividad de la noche con la presencia del maestro Jaime Torres, quien, apenas pisó el escenario, disparó: ?Digo con orgullo que soy hijo de bolivianos?. Una alusión que recordó de golpe las reacciones racistas de la clase media porteña al ocurrir los hechos de Villa Soldati.
Después de la sublime aparición de Jaime Torres, subió al escenario quien, según palabras de Dino, ?no sé si es el mejor bandoneonista que hay. O por lo menos el que más me gusta a mí?. Presentado de esta manera, subió Julio Pane para dos interpretaciones a puro bandoneón que sacaron chispas.
Zambas, chacareras y sonidos del altiplano se conjugaron en toda la creatividad que puede brindar el maestro Dino. El último invitado fue el Tata Cedrón, quien con su particular estilo cantó dos tangos que no enriquecieron mucho el alto nivel que tenía el concierto.
Saluzzi habló bastante, más allá de presentar a sus invitados, sobre reflexiones acerca de cuestiones varias, relacionadas con el acervo popular vinculado con el folclore y el tango. No obstante, más allá de que se lo notaba realmente contento y disfrutando del momento, sus palabras denotaban cierta molestia, separando constantemente un ?nosotros? defensor de la música popular argentina y un ?ellos? compuesto por las industrias discográficas y el grueso de las radios que pasan música foránea.
Después de más de 90 minutos de música, el punto final llegó con ?La llorona?, una zamba de Atahualpa Yupanqui, y ?Lunita tucumana?, con los que, desde sus arreglos y ritmos particulares, se encendieron las emociones de los presentes.
Dino Saluzzi está vigente y creativo y es uno de los máximos exponentes de la música popular argentina, con la pena de que el reconocimiento sea mayor en el extranjero que en su propio país.
Teatro de la Comedia. Rodríguez Peña 1062. Jueves 24 de febrero y 3 de marzo, a las 21.30.