Tal como lo había anunciado el jueves pasado, el Gobierno de la Ciudad aumentó la distribución de alimentos que habitualmente lleva adelante a través del Programa de Apoyo a Grupos Comunitarios.
Un nuevo plan, denominado "de Refuerzo Alimentario", fue puesto en marcha el 20 de diciembre para hacer frente a la crisis social que estalló con los saqueos. Hasta el fin de semana, habían sido repartidas alrededor de 50 mil bolsas con comida en distintos comedores comunitarios, comisiones vecinales de villas y organizaciones de barrios carenciados, inmuebles ocupados y asentamientos.
El jueves 20 -el día posterior a la fecha en la que se iniciaron los saqueos- fueron repartidas en el barrio Ramón Carrillo, en la villa 6 y en Floresta, 440 kilos de leche en polvo. Ese mismo día se entregaron a la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), en las zonas de Barracas y la Boca, 400 bolsones de comida.
Al día siguiente fueron repartidos en la Ciudad de Buenos Aires 3607 bolsas antes de las 16 horas y luego se compraron 7 mil bolsones más a comerciantes mayoristas (como el hipermercado Makro) con el objeto de repartirlos durante el resto del día. Éstos estuvieron compuestos por arroz, fideos, polenta, aceite, tomate, caballa, yerba, azúcar y arvejas.
Finalmente el Mercado Central proveyó 30 mil bolsones más, compuestos por papas, cebollas, zanahorias, naranjas, azúcar, aceite, yerba, fideos y polenta, que fueron repartidos en los días siguientes.
PRÉSTAMOS PARA LOS COMERCIANTES DAMNIFICADOS
Con respecto a los préstamos que el gobierno de la Ciudad otorgará a los comerciantes que hayan sufrido daños durante la crisis (ver nota al pie), desde la secretaría de Desarrollo Económico -organismo que motoriza los créditos- anunciaron que ya se relevaron 400 cuadras y que hay 50 carpetas con los datos de los locales damnificados. Pero que "dada la situación del país" y "la incertidumbre reinante", la mayoría de los posibles beneficiarios prefiere esperar para "ver qué pasa" antes de tomar el préstamo.
