Este miércoles, la querella mayoritaria de familiares de tripulantes del submarino ARA San Juan denunció al expresidente Mauricio Macri y al exministro de Defensa Oscar Aguad por el presunto encubrimiento del hundimiento del submarino, luego de que un miembro de la Armada asegurara ante la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia que desde el 5 de diciembre de 2017 el Gobierno de Cambiemos sabía dónde estaba la embarcación.
La denuncia fue realizada a pocos días de cumplirse el tercer aniversario del naufragio del buque en el Atlántico Sur, que se recordará el domingo 15.
La querella -patrocinada por los abogados Valeria Carreras, Lorena Arias y Fernando Burlando- presentó esta mañana la denuncia penal ante los tribunales federales de Comodoro Py por encubrimiento agravado contra Macri y Aguad, entre otros, confirmaron a Télam fuentes judiciales.
Además, este martes el fiscal de la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia, Noberto Bellver, insistió en que “el expresidente (Mauricio Macri), como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas tiene una responsabilidad en lo que pasó”, en referencia al hundimiento del ARA San Juan y el consecuente fallecimiento de sus 44 tripulantes.
“Se supone que él y sus principales funcionarios son los que dan las órdenes y se supone que debería estar enterado del estado de las naves argentinas de guerra, por lo que para mí, tanto el expresidente como el ministro de Defensa (Oscar) Aguad, como el almirante (Marcelo Eduardo Hipólito) Srur, tienen responsabilidad”, afirmó Bellver en declaraciones a Radio 10.
El primer paso de la querella fue solicitar ayer que se certifique los dichos del contraalmirante Enrique López Mazzeo en la audiencia desarrollada ante el tribunal de apelaciones encabezado por el camarista Javier Leal de Ibarra.
En tanto hoy realizaron la denuncia en los tribunales porteños del barrio de Retiro porque consideran que fue en esa jurisdicción que el entonces Gobierno nacional privó a las familias de obtener información verdadera sobre el hundimiento del ARA San Juan, cuyo último contacto había sido el 15 de noviembre de 2017, hecho en el cual murieron 44 tripulantes.
Ante la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia, López Mazzeo reconoció que el 5 de diciembre de 2017 se conocía la ubicación del submarino, gracias al dato aportado por el buque oceanográfico Cabo de Hornos de la Armada de Chile y que, incluso, se requirió autorización para que Gran Bretaña provea el ROV (robot) para ingresar al cañadón, información que, según sostiene la querella, fue ocultada por miembros del Gobierno y de la Armada.