Tal como lo adelantó Noticias Urbanas, el jueves de la semana pasada, Alberto Fernández se involucró de lleno en la campaña de Matías Lammens para que pueda ganar la Ciudad en un balotaje con Horacio Rodríguez Larreta. Es más, en esa nota se habló de cómo sería el acto de relazamiento de campaña que este martes compartieron ambos y en cual dieron a conocer un documento con sus propuestas para la Ciudad.
El candidato presidencial por el Frente de Todos, Alberto Fernández, sostuvo durante el acto de esta tarde que “las sociedades ricas son las que desarrollan la inteligencia” al firmar un compromiso junto al candidato a jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Matías Lammens, para impulsar la inversión en educación y ciencia y tecnología en el distrito porteño.
“Empezamos una segunda etapa con Matías. En la primera, dediqué menos tiempo a mi querida Buenos Aires. Ahora vamos a convencer a todos los porteños de que tenemos la posibilidad vivir en una ciudad que se integre al resto país, en una Argentina federal que todos y todas nos merecemos”, dijo Fernández al presentar la propuesta “Buenos Aires, ciudad del conocimiento” en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.
Por su parte, Lammens destacó la necesidad de “aprovechar la capacidad y los recursos humanos que tiene la Ciudad, con el objetivo de generar políticas públicas, brindar soluciones urbanas y construir un modelo de desarrollo que permita trasladar el mundo del conocimiento al de la industria y la producción”.
“Con Alberto coincidimos en crear la Agencia de Ciencia, Tecnología e Innovación. Para eso, se necesita voluntad política y un marco institucional, que contenga y estimule a los científicos e investigadores”, completó.
Fernández y Lammens estuvieron acompañados por la candidata a vicejefa de Gobierno, Gisela Marziotta; la candidata a senadora, Dora Barrancos; investigadores, científicos, becarios e integrantes de la comunidad universitaria.
Con @MatiasLammens firmamos el compromiso para convertir a Buenos Aires en la #CiudadDelConocimiento. Vamos a poner la educación, la ciencia y la tecnología al servicio de mejorar la calidad de vida de los porteños y todos los argentinos. Una ciudad y un país mejor son posibles. pic.twitter.com/HjiE4DpCcB
— Alberto Fernández (@alferdez) September 17, 2019
A continuacdión el documento que dieron a conocer este martes, Fernández y Lammens:
BUENOS AIRES, CIUDAD DEL CONOCIMIENTO
La ciudad de Buenos Aires es el espacio geográfico con mayor densidad de recursos humanos e institucionales en materia de Educación Superior, Ciencia y Tecnología. Sin embargo, por la ausencia de una mirada estratégica, no ha logrado articular estos elementos ni potenciarlos en favor de los porteños/as ni de los argentinos/as. Con una nueva mirada y una adecuada política se puede construir una referencia con proyección nacional y regional.
Es la jurisdicción con mayor cantidad de graduados/as universitarios/as. Cada 1000 habitantes, 160 han completado la universidad. Mientras que el promedio nacional corresponde a 37. Es, además, sede de la UBA, la universidad pública más grande del país y brindan oferta educativa otras 6 Universidades Nacionales y 20 universidades privadas. También se radican
en la ciudad 4 Institutos Universitarios estatales y 7 Institutos Universitarios.
La ciudad tiene una densidad de científicos/as que triplica el promedio nacional. Cada 1000 habitantes 8.9 se dedican de forma exclusiva a la investigación mientras que en el resto dpaís esta cifra ronda el 2.8. Es decir 3900 investigadores/as, técnicos/as y becarios/as cada millón de habitantes contra 1186 del total del país. La ciudad es sede de más de más de 100 Institutos y Centros de Investigación compartidos entre las universidades y el CONICET que cubren todos los campos de las ciencias desde las ingenierías a las ciencias sociales.
La investigación científica se realiza al más alto nivel con activa cooperación internacional con instituciones tales como la sociedad Max Planck de Alemania, que tiene en CABA una de sus 4 sedes en el exterior compartida con el CONICET, y el CNRS de Francia entre otras de todo el mundo.
Actualmente la Ciudad no aprovecha ese enorme potencial y carece de una política integral que le permita capitalizar el conocimiento que se produce en su territorio. En rigor, el sistema científico ya afincado en el distrito requiere de una voluntad política que propicie su articulación con el Estado local para potenciar el desarrollo de sectores productivos estratégicos y la formulación de soluciones innovadoras para atender problemáticas urbanas, como el acceso a un hábitat digno, la movilidad, la salud, la educación y el medioambiente, entre otras.
En sus tres periodos de gestión, el macrismo incumplió lo establecido por la Ley n° 2511 (2007) “Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, tanto en su dimensión institucional como en lo que refiere al financiamiento de la política de promoción científica en CABA.
En la actualidad, la inversión pública en ciencia en la Ciudad es ejecutada por la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación, dependiente del Ministerio de Educación e Innovación de la Ciudad. Esta Secretaría tiene asignado, para 2019, sólo $501.489.942. De acuerdo con lo previsto en la Ley de Ciencia, el presupuesto para 2019 debería ascender a $3.270 millones, es decir 6 veces más de lo asignado.
Además de contar con un presupuesto inferior al previsto por la Ley, cabe destacar que la asignación de fondos vigentes también revela la ausencia de una política estratégica para el desarrollo de una política de promoción científica-tecnológica. Por ejemplo, del total de fondos vigentes, el programa de fomento de la cultura emprendedora comprende el 26,8% del total del
presupuesto de la secretaría, mientras que el programa de desarrollo y fomento de la ciencia sólo cuenta con el 6.21% ($31.187.695).
La falta de lineamientos estratégicos y de un marco institucional robusto para la promoción de la ciencia y la tecnología en el distrito impiden observar resultados en la articulación delsistema científico tanto con el ámbito público como con los sectores productivos.
Desde nuestra perspectiva, una ciudad inteligente no es aquella que meramente compra e incorpora tecnología. Para nosotros una ciudad inteligente, es una ciudad con capacidades propias donde la inteligencia y la tecnología fortalezcan las relaciones sociales y productivas. La inteligencia también tiene una dimensión colectiva y es factor clave en el presente ya que le brinda a
la sociedad la plasticidad adecuada para aprovechar las oportunidades y mitigar riesgos en un contexto global y regional muy dinámico y volátil.
La política tiene como desafío construir un proyecto donde tiene lugar tanto el deseo, el esfuerzo y el talento individual como las iniciativas y anhelos colectivos. Un buen proyecto político debe lograr que ambas dimensiones no compitan sino que se potencien mutuamente y desplieguen toda su capacidad en armonía. Una buena política sienta las bases para que el desempeño
de las empresas y los logros personales sean el resultado del esfuerzo propio en un contexto favorable y con un amplio y conveniente acceso a bienes y servicios públicos. Una buena política enlaza y articula habilidades y saberes para lograr una trama social y productiva vibrante, dinámica e inclusiva.
Una Buenos Aires del conocimiento es una ciudad que construye su propio concepto de ciudad inteligente. Una ciudad que convoca a los científicos/as, los tecnólogos/as y los profesionales a resolver los problemas de la vida urbana y a potenciar su modelo de desarrollo productivo. Una ciudad que se propone usar las herramientas más modernas y que también se
organiza para impulsar el desarrollo de nuevas tecnologías. Una ciudad que invita al resto de América Latina y al mundo a conocer y disfrutar de la cultura y la educación que ofrecen sus intelectuales, artistas y universidades. Una ciudad generosa con el resto de los argentinos/ as, poniendo su potencial y recursos al servicio en la búsqueda de mejores soluciones para
mejorar las condiciones de vida en todas las ciudades grandes y medianas de nuestro país.
De eso se trata la propuesta de convertir a Buenos Aires en la Ciudad del Conocimiento.
PRIMERAS ACCIONES PARA PONER EN MARCHA LA TRANSFORMACIÓN
•Crear la Agencia de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de Buenos Aires como órgano rector de la política de promoción científica y de vinculación tecnológica del distrito.
•Convocar a las instituciones del sistema científico localizadas en la Ciudad, sean nacionales o locales, públicas o privadas, a desarrollar soluciones a los problemas urbanos a partir de los aportes de las diversas disciplinas. Con una adecuada visión estratégica, una mejor articulación y financiamiento, se podrán aprovechar de mejor manera el potencial de los
recursos localizados dentro del espacio de la Ciudad.
•Movilizar talento, instituciones y recursos para mejorar la integración física, social y productiva de la ciudad de Buenos Aires con los núcleos urbanos que constituyen el conurbano bonaerense. Poner en marcha un programa de investigación y desarrollo en temas urbanos que permita construir un ámbito de trabajo y cooperación con otras ciudades de argentinas. El desarrollo urbano también puede tener una fuerte perspectiva federal.
•Brindar una nueva dinámica a los aglomerados tecnológicos como el Distrito Tecnológico para estimular la conformación de un sistema donde el conocimiento y la producción se entrelacen virtuosamente.
•Enriquecer el entorno empresarial con la creación de un centro tecnológico especializado en industria 4.0 que le permita a las empresas acceder a información, capacitación, asesoramiento en financiamiento y nuevos negocios, y a la prueba y ensayo de
nuevas tecnologías.
•Generar espacios públicos de co-working combinados con centro de apoyo a emprendedores/as y jóvenes para que las condiciones iniciales no sean un factor que invalide las posibilidades de desarrollar sus iniciativas.
•Promover a Buenos Aires como el gran centro latinoamericano de formación de posgrado y el polo más importante de aprendizaje del español para China y el resto de los países asiáticos.
•Constituir el Consejo de Educación, Trabajo y Producción de la CABA para generar vinculaciones orgánicas entre la Educación Técnica Profesional y el mundo del trabajo. Reinstaurar el Profesorado de Educación Técnico Profesional en Concurrencia con Título de Base.
•Impulsar la articulación de la ETP con la educación para adultos/as de modo de brindar soluciones educativas a las más de 450.000 personas de la CABA sin secundaria completa. Generar articulaciones verticales al interior del sistema de ETP y con Universidades Nacionales.
•Impulsar la articulación del sistema científico local con la Escuela en los Niveles Inicial y Media para desarrollar y fortalecer contenidos educativos de programación, y diversas áreas de ciencia y tecnología.
COMPROMISOS
1. Nos comprometemos a impulsar las acciones estratégicas para que el Estado Nacional y el Gobierno de la Ciudad generan un escenario propicio para que las instituciones científicas y tecnológicas nacionales participen en la resolución de problemas urbanos y el desarrollo de otras acciones estratégicas que impacten en la calidad de vida de quienes viven y trabajan
en la Ciudad de Buenos Aires.
2. Nos comprometemos diseñar y poner en marcha programas de cooperación entre el Estado Nacional, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y, cualquier otra ciudad de Argentina que deseen integrarse a la iniciativa, para impulsar iniciativas de investigación y desarrollo en temas de relevancia para mejorar el hábitat urbano, el acceso a servicios y forjar una perspectiva propia de ciudad inteligente a partir de una combinación conveniente entre la adopción y el uso de tecnologías disponibles y el estímulo a la producción local de componentes, infraestructura, servicios y otros recursos.
3. Nos comprometemos a propiciar la suscripción de convenios estratégicos de cooperación entre la Agencia de Ciencia y Tecnología de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el Ministerio de Educación Nacional para evaluar.
