En busca de dilucidar el misterio que rodea al avión venezonalo-iraní que llegó el 6 de junio a la Argentina, el juez Federico Villena dispuso el allanamiento en el hotel de Canning donde están hospedados los 19 tripulantes de la aeronave.
El magistrado dispuso el allanamiento en el Hotel Plaza Central Canning, en una causa que se encuentra bajo secreto de sumario por pedido de la fiscal Cecilia Incardona que impulsó el lunes, la acción penal para que se investiguen los hechos denunciados.
En el operativo a cargo de las fuerzas federales, se secuestró documentación y todos aquellos papeles que habían en el hotel vinculados al Boeing 747-300M matrícula YV3531 de la empresa venezolana Emtrasur, que se encuentra retenido en el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, a cuya terminal de carga arribó el lunes 6 de junio.
La Policía Federal no sólo revisó los dormitorios de la comitiva del viaje de la sospecha: también ingresó a las habitaciones de todas las personas que pasaron la noche en ese hotel.
Tanto los iraníes como los venezolanos se mostraron tranquilos durante todo el operativo y no mostraron resistencia. Se quedaron callados, casi sin hacer comentarios. Los pasajeros fueron identificados y se tomaron sus huellas dactilares con juegos de ficha completos. Fueron también formalmente notificados de la causa.
A todos se les secuestraron sus pasaportes y celulares. También, se les decretó el impedimento de salida del país, según confirmaron altas fuentes de la investigación a Infobae.
César Giuiggioloni, uno de los propietarios del Hotel Plaza Central Canning, dialogó este martes con radio La Red y precisó que los tripulantes del avión venezolano-iraní llegaron al lugar por medio de una agencia de turismo que suele trabajar con el complejo hotelero. Asimismo, aclaró que el allanamiento no es al hotel, sino que se trata de un procedimiento sobre las personas que están alojadas.
“El hotel tiene 19 habitaciones y se revisó todo”, aseguró Giuiggioloni durante la entrevista.
🗣🎙 Hablamos con César, dueño del Hotel Cali donde se encuentran los ciudadanos iraníes y venezolanos que están siendo investigados por el avión demorado en Ezeiza, en #Vilouta910 con @pviolutaoficial 📻 | AM 910 pic.twitter.com/6Uw1k66zSH
— Radio La Red 📻 (@radiolared) June 14, 2022
Imágenes de las cámaras de seguridad del hotel a las que tuvo acceso Infobae muestran algunos de los movimientos de los tripulantes del avión venezolano-iraní. Durante su estadía, según confirmaron a este medio, salieron del lugar para realizar compras por la zona. “Muchas valijas de los tripulantes con ropa quedó en el avión”, agregó.
Todo se dio en el marco de la causa penal que se inició por decisión de la representante del Ministerio Público Fiscal. La fiscal Incardona había pedido, al abrir la investigación penal, toda la información vinculada a los tripulantes iraníes para determinar si guardaban algún tipo de relación con organizaciones terroristas.
La causa penal se abrió tras la presentación realizada por la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) quien pidió ser querellante en el expediente y había requerido que se investigue previamente a los iraníes que eran parte de la tripulación para lo cual debían se retenidos en nuestro país.
La lupa de la investigación está puesta sobre el piloto de la aeronave, a quien primero se señaló como un integrante del Quds pero “el cruce de información” habría arrojado después que en realidad se trataría de un homónimo, diez años menor.