El titular del PO, Jorge Altamira proyecta de cara a las elecciones legislativas para 2013 y haciendo uso de la frase de campaña con la que se presentó en las primarias previo a las elecciones presidenciales 2011, asegura que “esta vez sí se va a conseguir el milagro”. En lo inmediato, desde su espacio, está convocando al paro de la CGT y la CTA previsto para este martes.
En declaraciones a la prensa, indicó que “la voluntad de la gente es meter a la izquierda en el Congreso y hay que empezar ya a trabajar en eso. Tenemos un maremoto de fuerzas contradictorias que trabajan, sin darse cuenta, para los objetivos de la izquierda. La Argentina se encuentra en estado de asamblea”.
Consultado sobre el cacerolazo, opinó que “son una expresión de descontento social, que se manifiesta, incluso en mayor medida, en las movilizaciones sindicales y se volverá a manifestar en la huelga del martes.
“Es el deterioro del Gobierno por el aumento del déficit fiscal y de la tasa de inflación, la devaluación del peso oficial y el cepo cambiario para pagar deuda externa”, manifestó.
En sintonía, expresó que “el 8N fue fogoneado entre bambalinas no sólo por la derecha sino por la centroizquierda de Binner y por sectores del gobierno como Scioli y Massa, que se disimularon con una posición neutral”.
En relación al kirchnerismo, Altamira afirmó que “está acabado como proyecto de desarrollo nacional independiente, hace mucho tiempo”. “La opción de poder real está en construcción. Para que se reúnan las condiciones de un viraje a la derecha, el país debería atravesar crisis aún mayores y una derrota popular”.
Por eso, continuó, “la derecha camina sorteando huevos y hace demagogia populista, mientras aplica impuestazos y reclama la devaluación masiva del peso y un tarifazo, en un ‘replay’ del ‘rodrigazo’ de hace 40 años”. “La alternativa de poder surgirá de la unión de la izquierda auténtica y el movimiento obrero”, finalizó.