En una conferencia de prensa desde Moscú para medios argentinos –vía zoom- en la cual participó Noticias Urbanas, para hablar sobre el conflicto con la OTAN y con Ucrania, y con la presencia del secretario general adjunto del Consejo del Partido “Rusia Unida”, Andrei Klimov y del Director de la Academia Latinoamericana de Ciencias de Rusia, Dmitriy Razumovskiy, se vertieron allí conceptos muy novedosos y definiciones sobre los hechos que se vienen dando en Europa y a nivel global.
Klimov aclaró que lo correcto para el análisis de la situación era empezar con los eventos del 2008 a partir de una idea sostenida por los gobiernos de Suecia y Polonia de alejarse de Rusia. La Unión Europea (UE) avaló esa postura y en su pleno acordó no firmar un acuerdo de seguridad estratégica con la Federación de Rusia. El interés de la UE por disciplinar y dividir al espacio post soviético fue en aumento (al igual que la entrada de países ex soviéticos en la OTAN) y la cooperación para la seguridad con Europa fue quedando sin respuesta en todos los ámbitos en los que los representantes rusos la planteaban. Ya faltaba voluntad de una buena convivencia.
Luego, en 2012 la secretaria de Estado, Hillary Clinton anunció que desde su posición no iban a permitir la integración del espacio post soviético. Así finalmente nace la guerra civil en Ucrania y el posterior golpe de Estado (mal llamado Maidán) en el que derrocan al Presidente en ejercicio, Viktor Yanukovich. Ante la continua agresión a los habitantes del Donbass, pobladas por rusoparlantes en el este ucraniano, Alemania y Francia, junto con Ucrania y Rusia, firman los Tratados de Minsk, que nunca llegaron a implementarse por cuestiones que ahora quedan más claras, pero en aquél momento solo era visible la negativa ucraniana a cumplirlos–sostenida por Washington y Reino Unido desde entonces- y eso era la avanzada de lo que se venía. De ese modo, y tras años de adiestramiento de tropas y de brindar equipamiento militar, la OTAN entendió que Ucrania ya podía ir a recuperar el terreno perdido en 2014 al que bombardeaba sin cesar desde hacía 8 años. Allí nació la operación militar de la Federación de Rusia.
A su turno Razumovskiy interpretó que Argentina por su cultura de discusión abierta y franca, es diferente y genera su propia opinión ante los sucesos que pasan en el mundo, no se plegó a las sanciones y ahora presentó su solicitud concreta de ingreso al grupo de los BRICS, ya que es muy correcto que se vayan sincronizando enfoques en un proceso que todavía puede llevar un tiempo.
Luego Klimov sostuvo que BRICS no es una organización ni un club como la Organización de Cooperación de Shangai (OCS) o la UE sino que es una Asociación que apuesta a la confianza, a los acuerdos y que tiene un Banco que juega un papel muy importante para los participantes. “No estamos pensando en un formato más amplio, pero sí en relaciones de mayor profundidad en el ámbito de la cultura, la economía, el tema climático, cuestiones humanitarias con países como Argentina y otros para que se vayan integrando en algunas de las actividades que se van discutiendo y promoviendo desde el BRICS.
También afirmó que “tenemos bastante fuerza y no necesitamos medidas especiales por ahora, ya que hay suficiente experiencia en los mandos militares y en nuestro equipamiento de alta tecnología” para estas situaciones. Limov sostuvo en la conferencia de prensa que casi todos los gobiernos occidentales se preocupan por lo que pasó luego del 24 de febrero. Parece que nadie reparó en Occidente que durante 8 años hubo quiénes masacraron a la población del Donbass matando a miles de personas.
Sergei Riabkov, vice canciller ruso, reunido en diciembre pasado (2021) con altos dirigentes de la OTAN fue absolutamente claro: “si esto no lo arreglamos en términos pacíficos y normales, solo nos quedará la vía militar”. Esto fue dos meses y medio antes de la operación militar. Pero no querían negociar nada, la decisión ya estaba tomada, luchamos contra fuerzas muy malignas. La OTAN se ha transformado en un bloque muy agresivo, que empuja a países que eran neutrales como Suiza a sancionar a Rusia cuando no lo hicieron ni siquiera con (Adolfo) Hitler.
Sin embargo, hay tres cuartas partes del mundo que entienden las cosas de otro modo, con mucha más población y PBI que estos aliados occidentales que no tienen futuro histórico. La UE no goza, ni gozará de buena salud, mientras tanto Argentina como todos los países que decidieron seguir interactuando con nosotros tienen un potencial histórico diferente, muy alentador hacia el futuro.
Klimov, desde Rusia Unida, ante una de las preguntas de Noticias Urbanas continuó: “no recomiendo a nadie ser un país inamistoso con Rusia, todos los países ya tienen bastantes problemas y no creo que sea sensato buscarse más. Dos ejemplos de esto son Finlandia que viene descendiendo en su calidad de vida ya que rompió todo su esquema de relacionamiento y ello le afectó el crecimiento y Hungría que desde el mismo lugar tomó decisiones más maduras para su pueblo, es una postura diferente, inteligente y hoy está construyendo 2 centrales nucleares en donde está Rosatom, nuestra empresa nuclear. También está el ejemplo de Turquía que, siendo de la OTAN, recibe a millones de rusos en su país, acepta los rublos, y las tarjetas rusas…Es muy simple creo, a los países que no tienen problemas con nosotros les va muy bien y a los “rusofóbicos” que además arman a Ucrania, les está yendo mal a todos.
Por último, quiero hablar –dijo Limov- del enorme arsenal de armas que Washington y sus aliados le están entregando al gobierno del actor, que no controla nada, es bueno para la TV y para recitar el libreto americano en distintos parlamentos de amigos de Estados Unidos. Una tercera parte de las mismas desaparecen y no se sabe adónde fueron a parar, quizás algún terrorista las use en contra de quién las fabricó; otra tercera parte no la saben usar las fuerzas ucranianas y las terminan abandonando cuando se retiran o cuando mueren en combate, y la otra tercera parte se las destruimos apenas entran al país. Hablan de una contraofensiva ucraniana gloriosa en Occidente como si hubieran ganado la guerra de Vietnam y la verdad es que sumaron 100 kilómetros cuadrados en donde montarán shows trágicos similares a los de Bucha. Mientras que Rusia reagrupó sus fuerzas, protegiendo sus tropas y los lugares estratégicos, Ucrania ocupó zonas donde ya no había nadie y la pírrica avanzada les costó 12.000 bajas fatales y miles de heridos en otras zonas. Un desastre.
Rusia está tranquila en su interior, mantiene su vida normal. No necesita cambiar nada, aseguró Klimov.
Para finalizar se refirió al atentado terrorista que le costó la vida a Daria Duguina, responsabilizó al MI6 británico, dijo que la mujer de Estonia no era la que controlaba la situación y que tardaron menos de un día en averiguar todo lo que pasó. Y que evitaron muchos atentados en las elecciones municipales del domingo pasado.
Ellos pensaron que íbamos a salir inmediatamente a vengar a Daria matando a algún líder de Occidente. Se equivocaron, no queremos venganza, no somos como ellos, no somos terroristas, finalizó Klimov.
