“Aníbal a estar a cargo del diagrama y de la presentación de las listas. Van a tener que discutir con él”, confirmaron desde sciolismo.
Más allá de que en su equipo Scioli tiene dirigentes con larga trayectoria partidaria y pertenencia pura a su espacio, interlocutores al tanto de la decisión del embajador explican que Aníbal Fernández puede aportar una impronta que le suma al motonauta: “Para discutirle temas de avales y cuestiones reglamentarias a Aníbal hay que estar preparado, no se las va a hacer sencilla si nos quieren hacer trampa para bajarnos”, remarcan.
Si bien en el sciolismo ya aseguraban tener garantizada estructura propia en los 135 distritos de la provincia de Buenos Aires para apuntalar la candidatura a gobernadora de Victoria Tolosa Paz y apuraban las conversaciones con los gobernadores del PJ para definir los candidatos en el resto del país, la designación de Aníbal Fernández representa todo un desafío para quienes buscaban forzarlo a declinar su postulación, a la que el propio Scioli calificó como “una decisión irreversible”.
Contra el “dedo” de Cristina
En los últimos días, ya muy cerca del esquema de campaña de Scioli, Aníbal F. advirtió que el dedo de Cristina no alcanzaba para evitar que haya una interna.
En los últimos días, Scioli intensificó los contactos con al menos cinco gobernadores del PJ para pedirles “no sumarse a los que no quieren que la gente decida en las urnas” y, por otro lado, garantizarles que si lo dejan competir planteará una interna “controlada” y “sin agravios ni descalificaciones”.