Luego de que Aerolíneas suspendiera a 376 empleados por medidas de fuerza tomadas hace unas semanas, los gremios aeronaúticos anunciaron un paro de 24 horas para el próximo lunes 26 de noviembre, en lo que será el inicio de la cumbre de líderes del G20.
La protesta fue anunciada en una conferencia de prensa que se realizó este miércoles en el Aeroparque Jorge Newbery, en la que Rubén Fernández, de la Unión del Personal Superior (UPSA) aseguró que quieren “dialogar y solucionar esto pacíficamente”.
Las suspensiones fueron comunicadas este martes por telegrama. Son de entre 10 y 15 días, según el nivel de afectación al servicio. “Las sanciones más largas corresponden a quienes hicieron abandono de trabajo”, informó la compañía. Durante ese período, el empleado no cobra el salario correspondiente.
Los empleados suspendidos son de las áreas de Tráfico (mostradores), contact center, rampa, mantenimiento y pilotos. El único sector que quedó afuera son tripulantes de a bordo (antes llamados azafatas), porque ese día no participaron de la asamblea. Los tripulantes hicieron asambleas el viernes 2 y el viernes 16, en ambos casos más acotadas en el tiempo y con un impacto menor sobre la operación, según describieron desde Aerolíneas.